Abogado acusa “violencia de género directa” en proyecto de jornadas 4/3
La discusión se dio en la mesa de trabajo que hoy sostuvo Liberación Nacional, una bancada que duda de la propuesta y cuyo voto será crucial para la aprobación o rechazo del proyecto.
El proyecto que permitiría la instauración de las jornadas laborales flexibles en Costa Rica tiene una “violencia de género directa” para con las mujeres, según dijo esta mañana el abogado laboralista, Ricardo Marín.
Él fue parte de la mesa de trabajo que hoy llevó a cabo la fracción del Partido Liberación Nacional (PLN) para el análisis de esta propuesta, una discusión vital si se toma en cuenta que la bancada verdiblanca tiene dudas sobre esta propuesta y que su posición será fundamental para el futuro de esta reforma, pues ellos suman 19 de los 57 votos.
Marín, quien estuvo en esa mesa junto a los sindicalistas Lenín Hernández (SINAE), Gilberth Díaz (SEC) y el exdiputado Víctor Morales Zapata, aseguró que permitir las jornadas excepcionales de 12 horas sería irresponsable para un país que apuesta al primer mundo y es parte de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
“Existe una violencia de género directa a las mujeres, una cosa es el tiempo efectivo de trabajo y otra cosa es el tiempo que cataloga la OIT como el tiempo dedicado al trabajo.
“El tiempo dedicado al trabajo puede ser el tiempo en que yo me traslade al trabajo, entonces no van a ser solo 12 horas laborando, sino que con la construcción de la pista a Cartago, que se ha atrasado, una persona puede estar 15 o 16 horas y va a llegar a su casa con las responsabilidades que tenga, sin ningún ánimo, cansada”, dijo.
Añadió que aprobar una reforma para permitir jornadas tan extensas en momentos en que los países desarrollados avanzan en la dirección contraria sería un error y que más bien el país debería estar enfrascado en la discusión para reducirlas.
“Sería muy irresponsable que esta jornada quede en 48 horas. Si apostamos a ser un país OCDE, un país de primer mundo, no podemos hacerlo a costa de la salud de las personas y considerar el trabajo un valor y no un costo, que una jornada sea de 48 horas.
“Será muy difícil llegar a decirle a un empresario, 'bajemos la jornada a 40', yo sé que es difícil, pero ¿cuál ha sido el método de negociación en países comparados como Chile? Paulatinamente, por años, ir rebajando la jornada. Hacer estudios de producción, de rendimiento, apostar por un rebajo de la jornada semanal, que se hagan análisis comparativos para que en dos o tres años llegue la jornada a fijarse en 40 horas, esa es nuestra propuesta”, añadió Marín.
Los diputados estarán concentrados esta semana en llevar adelante jornadas de trabajo para entender y socializar el proyecto presentado por el Poder Ejecutivo, con el fin de que su discusión, dispensada de trámite por el Congreso, inicie de manera acelerada a partir del próximo lunes.
Cada fracción legislativa tendrá mesas individuales y grupales para este fin, con representantes tanto del Gobierno como de la sociedad civil y el sector productivo.