Por Mariana Valladares |27 de noviembre de 2024, 17:25 PM

La exreina de belleza, Lisbeth Valverde, es una de las cuatro finalistas de Mira quién baila (MQB) y este domingo dará su 100% en la pista para volver a coronarse, aunque esta vez como ganadora de un concurso coreográfico.

Valverde conversó con Teletica.com sobre los retos y aprendizajes de estos tres meses de competencia, y dice que ha sido un curso intenso de aprendizaje y autoconocimiento.

"Definitivamente, ha sido una experiencia de mucho aprendizaje, no solo en el baile, sino también a nivel mental, físico y emocional. Participar en un reality implica dejar la vida personal y el trabajo para entregarse al 100%. Ha sido un reto muy grande, pero también muy enriquecedor. Me llevo nuevas amistades y compañeros, con quienes compartí dolores, risas y momentos inolvidables. Eso es lo que más voy a extrañar: la dinámica de los compañeros.

"Mi mayor reto ha sido la parte física. Ninguno de nosotros está acostumbrado a una jornada física tan intensa. Tal vez Naomy, que es atleta de tiempo completo, lo tenía más manejado, pero para los demás fue un desafío inmenso. Aunque hacía ejercicio regularmente, no era con esa intensidad ni constancia, lo que hizo de esto un gran reto", acotó.

Gala 8 - Contemporáneo - Lisbeth Valverde y Javier Acuña
Lisbeth Valverde y Javier Acuña ganaron la octava gala de MQB al ritmo de contemporáneo. 

Sobre su coreografía favorita, dice que fue el cha cha, ya que la hizo creer en sus capacidades.

"El cha-cha-chá fue mi presentación favorita porque fue la primera vez que bailé en mi vida. Además, ganamos el premio Wow, lo que me hizo creer en mis capacidades y en todo lo que puedo lograr.

"He tenido muchos momentos emotivos, pero el más fuerte fue el día que me nominaron junto a Linda. Me afectó bastante porque admiro mucho a Linda y sé que es una competidora muy fuerte. Fue un momento en el que pensé que podría salir de la competencia, y eso lo hizo muy emotivo para mí", expresó.

Lis, como es conocida, dijo que le encantaría volver a participar en algún formato de Teletica.

"Por supuesto que sí. Desde antes de participar en Miss Costa Rica, me ha encantado trabajar con Teletica. Todos en el canal son muy profesionales, y cada reto es una oportunidad para sacar una mejor versión de uno mismo. A nivel personal y profesional, definitivamente aceptaría volver.

"Siempre he creído mucho en mí y en mis capacidades. He participado en más de 12 concursos de belleza, y creo que si uno no cree en sí mismo, nadie más lo hará. Desde el inicio me vi llegando lejos en la competencia, aunque no sabía cómo serían los votos o el apoyo", mencionó.

Sobre el apoyo del público, dice que está muy contenta con el apoyo recibido y que siempre llevará en el corazón a esas personas que la han acompañado en el proceso.

"Estoy muy contenta con el apoyo recibido. Se han desarrollado muchas campañas, tanto de patrocinadores como de páginas de reinas de belleza, y personas del Mercado Central han estado conmigo en este camino. Ya enfrenté una nominación con Luis Montalbert, alguien muy querido y fuerte en la competencia, y logré superarla. Esto me da confianza de que mi trabajo ha sido valorado.

"Mi fundación es un centro de atención integral para personas adultas con discapacidad, ubicado en Santo Domingo de Heredia. He trabajado con ellos durante años como educadora especial y siento un compromiso muy grande con esta población. Mi sueño es mejorar la infraestructura de la institución, ya que funciona en una casa adaptada como aulas, lo cual no es ideal. Si gano, el premio sería invertido en ampliaciones, como un salón interactivo con aire acondicionado, sillones y equipos de sonido, porque a ellos les encanta bailar y escuchar música", recalcó.

Lamentablemente, Valverde se lesionó la tarde de este martes mientras ensayaba sus coreografías de esta semana de tango, salsa y pop, y aunque por el momento no se sabe si se podrá presentar el domingo, resumió su participación en el formato.

​"He aprendido demasiado, no solo en baile, sino también en lo físico, emocional y espiritual. Esta experiencia me ha enseñado que los retos muchas veces están en nuestra propia mente. Cada día me he levantado con dolores y lesiones, pero también con motivación para dar lo mejor", finalizó.

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