Por Susana Peña Nassar |5 de agosto de 2023, 8:00 AM

¿Ha notado que a su perro se le "inmoviliza" la pata unos segundos cuando se levanta repentinamente?

Preste atención a esta señal, ya que podría tratarse de una luxación de patela o rótula, un pequeño hueso ubicado en la articulación de la rodilla. Esta es una de las lesiones más comunes que atienden los veterinarios.

"Es un hueso muy determinante en todo el proceso que se da de flexión y extensión de la rodilla; y la rodilla es una de las articulaciones más importantes de nuestro organismo: tiene la mayor cantidad de ligamentos y estructuras para podernos mantener en pie", explicó Mauricio Jiménez, director del Hospital de Especies Menores y Silvestres de la Universidad Nacional (HEMS-UNA).

Con ayuda de 'Rubí', una paciente Poodle, el doctor explica cómo detectar este padecimiento.

"Es importante tener en cuenta que al inicio, en este tipo de patologías, lo que podemos ver como signos es que muchas veces los perritos, después de dormir, de pronto se levantan y la patita les queda 'tiesa'. A ellos les duele y, cuando se movilizan, se vuelve a acomodar y siguen caminando. Es algo que se observa con frecuencia", dijo el experto.

La explicación es sencilla: cuando la patela se sale, la pata del perro queda completamente estirada y, cuando regresa, la articulación retoma su posición normal. El médico veterinario advierte que en ese "juego" de salirse y acomodarse, en algún momento, el hueso va a quedar afuera completamente.

Explicación del doctor Jiménez sobre la luxación de patela:


"Una enfermedad como la luxación de patela, los va a predisponer también a ellos a sufrir ruptura de ligamento cruzado. El diagnóstico se puede hacer por medio de radiografías; pero es muy importante la palpación que hagamos de la articulación de la rodilla", añadió (ver video anterior).

Esta condición es muy frecuente en razas pequeñas como Poodle, Bulldog francés, Pomerania, Yorkshire terrier, Chihuahua, Maltés, entre otras; aunque las razas grandes también podrían sufrirla.

"Regularmente, en las razas pequeñas, la patela se va a salir hacia medial y, en las razas grandes, hacia lateral; pero esto no es una regla, porque hay perros pequeños que presentan hacia lateral y otros hacia medial, detalló el director del HEMS-UNA.

En caso de que su fiel amigo de cuatro patas muestre signos de dolor o dificultad para movilizar alguna extremidad, sobre todo si las levanta o renquea al caminar, la principal recomendación es consultar de inmediato con su veterinario de confianza para someterlo a los exámenes que permitan un eventual diagnóstico y tratamiento.

InstagramTeleticacom