¿Se está infiltrando el crimen organizado en nuestras fuerzas de Seguridad?
En una semana, el país sumó ocho detenciones, entre jueces, oficiales de Fuerza Pública, técnicos judiciales y hasta una oficial de la DIS por presuntos ligámenes con el narcotráfico.
“Son el botín preferido de los grupos criminales”: Rándall Zúñiga, director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), tiene claro que las organizaciones criminales saben el valioso recurso que implica tener de su lado a diferentes funcionarios ligados con la ley y que, en teoría, deberían hacerla valer.
Entre el 11 y el 18 de diciembre, ocho personas ligadas a las fuerzas policiales o al sistema judicial han sido detenidas como resultado de investigaciones por presuntos ligámenes con estructuras de narcotráfico y crimen organizado.
El 11 de diciembre, pasadas las 6:00 a.m., la policía judicial allanó en Cieneguita de Limón una vivienda y detuvo a un hombre de apellido Sandí, quien fungía como juez penal en esa provincia. Las autoridades lo investigan por presuntamente recibir un soborno por parte de la organización ligada a Tony Peña Russel, alias “La T”.
Dicha investigación inició luego de que varios sicarios asesinaran a un exagente del OIJ quien fungía como abogado de Peña Russel. Cuando decomisaron el teléfono a la víctima, encontraron los supuestos ligámenes entre el juez y la organización.
Fuentes policiales estiman el soborno en $15 mil dólares y, de acuerdo con el fiscal Javier Valerio, el aparente soborno tenía como objetivo un cambio de la prisión preventiva que entonces pesaba sobre un hombre de apellido Herrera, conocido como “Banano”.
Herrera era parte de los “Escuadrones de la Muerte” de alias “La T”.
Cinco días después, un agente del OIJ fue capturado por sus compañeros. En este caso, las autoridades los investigan como sospechoso de engañar a ciudadanos sobre supuestas causas seguidas en su contra y de exigirles dineros bajo la promesa de alterarlas.
De acuerdo con el informe preliminar, el servidor judicial aparentemente citó, en al menos dos ocasiones, a diferentes personas para que se presentaran a la delegación policial. Una vez que estos se presentaban, el sujeto los atendía afuera de las instalaciones y, supuestamente, les indicaba a manera de engaño que en su contra existían pesquisas.
"Para nosotros como Organismo de Investigación Judicial, si bien esta noticia es muy dolorosa, pues también nos reafirma el compromiso de combatir cualquier situación que pueda existir de corrupción", dijo en ese momento Randall Zúñiga.
Apenas unas horas después, la policía judicial detuvo a una agente de la Dirección de Inteligencia y Seguridad (DIS) por sospechas de que mantenía una relación con grupos de narcotráfico y que incluso acudió a una reunión con integrantes de crimen organizado en un hotel, según consta en videos de cámaras de seguridad en poder de las autoridades.
Las autoridades sospechan que la narcoestructura le pagó a la funcionaria más de $100 mil dólares tras la reunión, la cual habría ocurrido hace tres años, cuando el OIJ empezó a investigar al grupo criminal.
El día de ayer, la funcionaria quedó en libertad tras la audiencia de medidas cautelares, pues el juzgado de Hacienda en Goicoechea consideró que no hay riesgo de fuga.
La lista la completan los cuatro policías, entre ellos dos jefes, detenidos este miércoles por su presunto vínculo con un grupo narco. También se aprehendió a una técnica judicial de apellido Valverde, empleada del Poder Judicial, señalada de asesorar a la organización en legitimación de capitales.
El director de la Fuerza Pública, Marlon Cubillo, conversó con Teletica.com y condenó la participación de los oficiales en estos hechos.
"La situación es de cero tolerancia con funcionarios, porque de ningún nivel policial se deben involucrar con grupos criminales. Damos todas las facilidades y nos ponemos a disposición de las autoridades para que investiguen", aseguró Cubillo.
Las detenciones ocurrieron tras 24 allanamientos efectuados en diversos puntos del sur de San José.
"Hemos detenido fiscales, jueces, policías de diferentes rangos y cuerpos policiales, es una realidad en la actualidad. El poder judicial y cuerpos policiales son el botín preferido de los grupos criminales. 6 jueces detenidos en este 2024. Cada vez que detectamos una situación le ponemos la perseguidora a los grupos", aseguró el director del OIJ.
