Fiscalía investiga si funcionarios de AyA distribuyeron agua aunque sabían que estaba contaminada
El Ministerio Público persigue el posible delito de circulación de sustancias envenenadas o adulteradas.
La Fiscalía Adjunta Agrario Ambiental investiga a tres funcionarios del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA) por, presuntamente, distribuir agua a pesar de que conocían que estaba contaminada con hidrocarburos.
En virtud de lo anterior dirigió tres allanamientos que tienen como objetivo recopilar pruebas para la investigación que se desarrolla en la causa 24-003241-0042-PE, que persigue la posible circulación de sustancias envenenadas o adulteradas.
La diligencia, que está a cargo del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y se mantiene en desarrollo al cierre de esta publicación, se lleva a cabo en las oficinas del Centro de Control Operacional y el Departamento Tecnología y de Información, en la sede central de la entidad, así como en la planta potabilizadora de Guadalupe de Goicoechea.
“El Ministerio Público investiga a tres funcionarios de Acueductos y Alcantarillados, de apellidos Ramírez, Quesada y Díaz, ya que, aparentemente, conocían que el agua estaba adulterada con hidrocarburos. Sin embargo, entre el 22 y 25 de enero, procedieron a distribuirla por la tubería del acueducto.
“En apariencia, a raíz de esta situación, aproximadamente 30 personas, incluidas menores de edad, presentaron afectaciones de salud, como irritación en la piel, malestar en garganta, dificultad para respirar y problemas gastrointestinales”, indicó la Fiscalía.
Sobre el particular, el presidente ejecutivo del instituto, Juan Manuel Quesada Espinoza, afirmó que lo que se investiga es la contaminación ocurrida en enero pasado, momento en que él fungía como presidente de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope).
El jerarca recordó que su gestión inició precisamente en medio de aquel escándalo, tras la destitución de Alejandro Guillén, el 30 de enero anterior.
“Desde el 3 de mayo envié a la Policía Judicial, sin necesidad de que me lo pidieran, un informe técnico, exhaustivo y detallado de más de 650 páginas con el propósito de colaborar con la investigación y con la firme esperanza que se identifiquen a los responsables de la contaminación, dijo Quesada.