Demanda de permisos de portación de armas aumenta por incremento de violencia
Otro servicio que se adquiere cada vez más es el de blindar vehículos.
La preocupación por la criminalidad que afecta al país ha motivado a muchas personas a pagar más de ₡25 millones para blindar su vehículo y a adquirir un permiso para portar armas de fuego.
El récord histórico que marcaron los 907 homicidios registrados en 2023 y la elevada cifra de asesinatos este año son algunos de los factores que generan una mayor sensación de inseguridad e impulsan a los ciudadanos a buscar nuevas alternativas de protección.
La adquisición de permisos para portar armas de fuego es un factor que ilustra esa preocupación (ver video adjunto de Telenoticias).
Las cifras lo constatan: según el Ministerio de Seguridad, en 2023 se otorgaron 8.102 permisos de portación y solo en el primer semestre de este año se contabilizaban 4.928 permisos. Es decir, que a medio año ya se habían dado el 60% de todos los permisos del 2023.
Estos permisos son únicamente para ciudadanos que deciden portar un arma, y no incluyen aquellos que se otorgan a empresas de seguridad privada y pública o bancos, por ejemplo.
No obstante, dentro de la industria de la seguridad también se ha percibido un aumento en la demanda de servicios, la cual se evidencia en el número de cursos para portar armas impartidos.
En el polígono y armería CDC en Pavas, aseguran que, en comparación con el 2023, este año registran un aumento del 20% en la adquisición de sus productos.
La situación criminal del país, que en promedio registra un homicidio cada 10 horas, también mueve otras industrias, que, pese a ser más costosas, también reportan un alza en sus ventas.
El blindaje de vehículos es una muestra de ello.
Blindar un vehículo en un nivel cinco, que es uno de los más altos, tiene un costo aproximado a los 50 mil dólares, es decir, más de ₡25 millones.
La protección incluye el tanque de gasolina, el techo y hasta la batería.
Otros productos más tradicionales de seguridad personal mantienen sus niveles de demanda similares al histórico, por ejemplo, los chuzos eléctricos o el gas pimienta, que se utilizan principalmente para repeler ataques de la delincuencia común.
Encuentre más detalles en el video adjunto.