Nacional

Más del 80% de los hidrantes del país no cumplen con los requerimientos de ley

Pese a que la meta de cantidad de hidrantes fijada en 2008 ya se superó, el caudal sigue siendo deficitario en la gran mayoría de la red nacional

Por Juan José Herrera |6 de marzo de 2019, 4:21 AM

Más del 80% de los hidrantes que componen la red nacional no cumplen con los requerimientos de la Ley 8641, creada en el 2008 precisamente con el fin de atender la crisis que existía en esa materia en el país.

Si bien la meta propuesta hace 11 años de alcanzar los 12.000 aparatos se cumplió con creces (a finales de 2018 se reportaban 14.126), las exigencias en cuanto a caudal siguen sin cumplirse en la gran mayoría de las unidades.

Un estudio del Cuerpo de Bomberos realizado con una muestra representativa de 320 hidrantes reflejó que el 83% de las unidades presentan incumplimientos, la gran mayoría por no llegar a los mínimos de presión establecidos en la ley.

En ese punto la norma definió diámetros de tuberías mínimos que garantizaran el caudal según la edificación a atender, por ejemplo 63 litros por segundo para hospitales o cárceles y 32 (l/s) para residenciales de estilo horizontal.

“Sin duda ya pasamos la etapa más crítica que era la escasez de hidrantes que existía, eso está superado, pero aún faltan cosas por atender principalmente en ese tema del caudal, que es donde más encontramos problemas siempre.

“La ley sin duda nos permitió mejorar muchísimo, pero como en todo faltan cosas por mejorar”, explicó Allen Moya, jefe de la Unidad de Prevención de Incendios del Cuerpo de Bomberos.

Escaso control

La Ley 8641 determinó que serían los operadores de los sistemas de distribución del servicio de agua potable los encargados de la instalación, operación y mantenimiento de los hidrantes.

Eso le permitió a las autoridades establecer metas anuales de instalación y mejora de las unidades.

Acueductos y Alcantarillados (AyA) y la Empresa de Servicios Públicos de Heredia (ESPH) son los principales actores en ese apartado y quienes se han preocupado más por ponerse en regla.

Según el último reporte de Bomberos, AyA gestiona 8.141 hidrantes y la ESPH 1.497, mientras que las Municipalidades (2.125) y las Asadas (2.363) se encargan de los puntos de la red más alejados.

Estos últimos, sin embargo, son también los más problemáticos.

De hecho, los datos sobre la cantidad de unidades parten del inventario que realiza el propio Cuerpo de Bomberos, pues los operadores siguen fallando en presentar sus reportes.

“Las municipalidades y Asadas siguen mostrando un rezago en la aplicación de la ley 8641. La dificultad con las Asadas se da ya que son más de 1.500 operadores, algunos muy pequeños que abastecen artesanalmente a algunas pocas familias en zonas rurales”, explicó Rolando Leiva, encargado del área de control preventivo de Bomberos.

En el caso de las municipalidades uno de los principales problemas era que muchas ni siquiera cobraban a sus usuarios la tarifa correspondiente a hidrantes, o bien no procedía a instalarlos conforme al mandato de ley.

Ambas situaciones fueron denunciadas en 2014 por Bomberos ante la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos.

“Posterior a esto (denuncia) varios municipios se acercaron al Cuerpo de Bomberos con planes de desarrollo e inversión. El problema fundamental se da en la falta de reportes sobre inventarios actualizados, lo que le dificulta al Cuerpo recopilar los datos de estos operadores y realizar el control cruzado con el levantamiento del sistema de información geográfica de nuestra institución”, añadió Leiva.

Más allá

Aún sin llegar a su meta propuesta, la ESPH se ha establecido como un referente en el cumplimiento de la norma.

La empresa pública de origen municipal, que gestiona tres cantones de la provincia florense, desarrolló un plan para la mejora del acueducto en el tema de ampliación de tuberías e instalación de hidrantes, con una meta anual de 75 aparatos para este 2019.

Sin embargo, desde el 2018 decidió incluir en su red los llamados hidrantes inteligentes, un sistema de monitoreo que permite obtener las condiciones en tiempo real de la presión de cada unidad.

Este sistema inició con una etapa donde se logró la instalación de 37 puntos de monitoreo y este año se consiguió la colocación de otros 45, todos distribuidos de forma estratégica según las mayores concentraciones de población, centros educativos, centros de salud, zonas industriales y en los límites geográficos de la red del acueducto.

Estos hidrantes, además, han permitido combatir el robo de agua a través de estas unidades, un problema que, a la par del número de hidrantes, ha ido creciendo en el país.