Costa Rica descarta nuevos casos de viruela símica tras declaratoria de emergencia de OMS
“Todos los pacientes que tuvimos en el pasado nos enseñaron que podemos manejarlo de manera adecuada”, dice el director de Vigilancia de la Salud, Roberto Castro.
El Ministerio de Salud descartó nuevos casos de viruela símica en Costa Rica, luego de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) la declarara como una emergencia internacional.
"A nosotros, en estos momentos, no nos han vuelto a reportar, desde hace varios meses, un caso de viruela símica", aseveró el director de Vigilancia de la Salud, Roberto Castro, en una entrevista con Teletica.com.
"Volvió a circular, pero no hay una razón por la cual hubiese desaparecido", agregó.
El vocero recordó que en su momento hubo vacunas disponibles contra el también llamado mpox y que incluso se utilizó con pacientes de riesgo.
Esta enfermedad se trasmite por contacto de persona a persona, sobre todo porque los pacientes no asocian sus lesiones con la enfermedad.
"Creo que en Costa Rica se atendieron bien los casos. No es una enfermedad que sea difícil de diagnosticar o de tratar. Todos los pacientes que en el pasado tuvimos creo que nos enseñaron que pudimos manejarlo de la manera adecuada.
"Esperamos que si se vuelve a presentar un rebrote en Costa Rica y si se da algo que llamamos una enfermedad reemergente, que lo manejemos de la manera correcta y podamos, básicamente, aislar a los pacientes en el sentido de que el contacto directo entre las personas evita que haya una transmisión generalizada", enfatizó.
La agencia sanitaria emitió el martes su mayor nivel de alerta, lo que debería “preocuparnos a todos”, en palabras de su director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus. El organismo ya había tomado una decisión similar en 2022, cuando se produjo un brote mundial de viruela símica causado por una cepa conocida como clado IIb.
Pero la epidemia actual, originada en República Democrática del Congo (RDC) y limitada de momento a África, tiene sus propias características. El virus, más contagioso y peligroso, es causado por el clado I y una variante aún más peligrosa, el clado Ib. Su tasa de mortalidad se estima en un 3,6%.
Un total de 38.465 casos fueron registrados en 16 países africanos desde enero de 2022, con 1.456 muertes.
