Baterías de reloj: de los objetos más peligrosos que los niños se meten en oídos y nariz

Cada semana, el Hospital Nacional de Niños (HNN) extrae hasta 15 objetos extraños de la nariz, oídos o inclusive la laringe y faringe de las personas menores de edad. 

Cualquier objeto pequeño al alcance de ellos es candidato a ser utilizado para este fin.

Sin embargo, hay uno que es de mayor importancia para los médicos: las baterías de tipo reloj o "botón". Así lo aseguró a Teletica.com el jefe a. i. de Otorrinolaringología del centro médico, Federico Murillo. 

"Hay un cuerpo extraño que es importante resaltar por su peligrosidad y por lo frecuente que se encuentra en los hogares: las baterías de tipo reloj o tipo botón. Estas vienen en los juguetes, en los relojes o en otros artículos", indicó.

¿Por qué es tan peligroso? 

Según explica el experto, cuando estos objetos entran en contacto con la humedad, se provoca un cierre de circuito que genera un ácido químico que comienza a actuar de forma inmediata y daña gravemente los tejidos. 

Además, si está en las vías respiratorias, los menores pueden aspirarlo hacia la tráquea y los bronquios, provocando la asfixia. 

"Las baterías tipo botón son la causa más importante de perforaciones del tabique, y en ocasiones puede causar daños aún más graves. También es muy peligroso cuando estas baterías quedan en el esófago, porque también pueden causar perforaciones o úlceras", explicó Murillo. 

Según dijo, la mayoría de niños no siente dolor hasta el momento en el que se mueve el cuerpo extraño. 

Padres: no intenten sacarlo

Una de las recomendaciones más importantes, además de no tener objetos pequeños al alcance de los menores de edad, es no tocar al cuerpo extraño dentro del niño. 

Según el médico, es mejor dejar esta parte del proceso a los especialistas, para evitar empeorar la situación. 

"Usualmente, intentar quitarlo sin la experiencia o sin la herramienta adecuada, muchísimas veces va a terminar provocando que se introduzca más. Y aún más grave, no se debe maltratar al niño para tratar de sacarlo, porque sino cuando llega al hospital y lo manejamos nosotros esto provoca mayor dificultar para tratar al paciente", concluyó. 

Los expertos recomiendan a los padres estar muy vigilantes ante estas situaciones.