Bancos reportan cada vez más operaciones sospechosas ante el Instituto Costarricense sobre Drogas
Más de 200 personas, representantes de diversos bancos nacionales y extranjeros, participan en un congreso en el que trascendió este dato.

Datos del Instituto Costarricense sobre Drogas (ICD) indican que entre el 1 de enero y el 21 de setiembre del 2018 se contabilizaron 340 Reportes de Operaciones Sospechosas (ROS), que le permitieron a esta institución enviar 42 informes a las autoridades judiciales competentes.
La mayoría de esos reportes, es decir, 283 fueron emitidos por bancos, informó la Asociación Bancaria Costarricense (ABC), que realiza un congreso en el que trascendió este tema.
Según el ICD, entre las actividades mayormente reportadas se encuentran: sector de construcción, servicios, alquileres, agentes inmobiliarios, actividades relacionadas a software e informática, sector automotriz, actividades jurídicas, pesca, transporte aéreo, entre otras.
Además, las nacionalidades con mayor índice de reportes son: Costa Rica, México, Nicaragua, Colombia, Estados Unidos, India, Israel e Italia.
“El sector financiero es de los más regulados en materia de legitimación de capitales y financiamiento al terrorismo.
"Por eso trabaja de manera permanente en este campo, no solo realizando responsablemente los reportes que corresponde ante el ICD, sino que procuramos que los funcionarios bancarios estén al día en materia regulatoria, de mejores prácticas de prevención y modos de operación de las bandas organizadas”, manifestó Mario Gómez, asesor legal de la ABC.
El 11 de mayo de 2017, se publicó la Ley No. 9449 que reforma una serie de artículos de Ley sobre estupefacientes, sustancias psicotrópicas, drogas de uso no autorizado, actividades conexas, legitimación de capitales y financiamiento al terrorismo.
Uno de los puntos más importantes de esta reforma es que señala la obligatoriedad de una serie de sectores de adoptar mecanismos de prevención en materia de legitimación de capitales e implementar medidas para identificar los riesgos de lavado.
Dentro de estos se incluyen, por ejemplo, casinos, agentes inmobiliarios, comerciantes de metales y piedras preciosas, algunas organizaciones sin fines de lucro.
También los abogados, notarios y contadores, los proveedores de servicios fiduciarios, cualquiera que preste facilidades crediticias, como casas de empeño y prestamistas, entre otros.
Urge cerrar nuevos portillos
Según Guillermo Araya Director del ICD, hay cuatro temas que preocupan a la comunidad internacional y en las que el país aún debe trabajar: i) las criptomonedas, ya que hay total anonimato detrás de quién las adquiere ii) los asuntos relacionados a la identificación del beneficiario final de las transacciones (esto por el uso de los denominados testaferros), iii) el uso de efectivo y iv) el poder de la corrupción.
“El país debe sentarse a estudiar los temas a profundidad y alinearse con las tendencias internacionales para no quedar rezagados.
"No podemos quedarnos esperando a ver qué sucede en otros países mientras nuestra realidad está siendo carcomida por el crimen organizado que dispone de todos los recursos económicos para operar y que a través de la corrupción se abren todas las puertas para echar raíces”, señaló Araya.
Para el sector financiero también es urgente trabajar en en el establecimiento de regulaciones y medidas que limiten el uso del efectivo.
“Para la ABC es fundamental que todos los sectores, en especial los no financieros, asuman el compromiso de trabajar articuladamente con las autoridades, para lograr el éxito de las estrategias de prevención y control que como país debemos implementar”, concluyó Mario Gómez Asesor Legal de la Asociación Bancaria Costarricense.