Alianzas estratégicas y el 'culturepreneur'

Bernal Fonseca / Empresario, culturepreneur y triatleta competitivo de larga distancia.

Generar impacto social y cultural no es un recorrido que uno debe transitar solo. A lo largo de mi trayectoria, he aprendido que la colaboración estratégica con marcas y aliados que comparten una visión similar a la nuestra, puede multiplicar el alcance de cualquier proyecto. 

No se trata solo de liderar iniciativas personales y de destacar como profesional, sino de unir fuerzas con otros para crear algo mucho más grande, cuyo impacto trasciende significativamente. 

Identificación de los aliados correctos

Uno de los retos más importantes que enfrenté al iniciar mi camino como emprendedor fue identificar los aliados correctos. No todas las empresas están listas para alinearse con un enfoque de triple impacto. Sin embargo, al encontrar esos socios estratégicos que entienden la importancia de generar valor más allá de las ganancias, todo empieza a tener más sentido y a fluir con mayor fuerza.

Una vez que se encuentra a los aliados correctos, el siguiente paso es desarrollar estrategias de colaboración que sean realmente efectivas. Estas deben tener un objetivo claro: transformar la cultura y el entorno social.

He trabajado con empresas como BAC, Kölbi, y FIFCO, que ya tienen gran madurez en estrategias que apuntan a un lugar más allá de algo comercial. Estos aliados son claves para llevar a cabo proyectos que realmente aporten valor en la sociedad. Colaborar con ellos me ha permitido amplificar mi mensaje e impactar a nuevas audiencias y sectores.

Otro ejemplo concreto es DMNTS, un proyecto que ha sido posible gracias a la colaboración de diversas marcas que comparten mi visión. A través de este programa, hemos dado visibilidad a más de 1800 emprendimientos en Costa Rica, conectándolos con inversionistas y recursos que de otra manera no habrían tenido acceso. Este tipo de colaboración demuestra cómo las marcas pueden, y deben, usar su influencia y recursos para impulsar emprendimientos cuyo eje está en el impacto que trasciende. 

Ahora, ¿por qué adoptar un enfoque de triple impacto? Creo firmemente que todas las personas deberían adoptarlo, ya que esto no solo crea sostenibilidad a largo plazo, sino que también responde a las demandas de los consumidores actuales. Cuando uno se enfoca en generar impacto social, los resultados económicos llegan por sí solos.

Soy testigo que al priorizar el impacto cultural y social, las oportunidades económicas se multiplican. Este enfoque no solo transforma mi negocio, sino también las vidas de aquellos con los que colaboro y las comunidades que se benefician de estos proyectos.

¡La colaboración estratégica es un motor esencial para generar impacto cultural!

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