No pedir perdón puede ser imperdonable
Enseñemos a perdonar, pero enseñemos también a no ofender. Eso sería más eficiente.
Pedir disculpas de manera madura y sincera es fundamental para mantener relaciones saludables, para demostrar respeto hacia los sentimientos de los demás y para construir confianza en sus relaciones personales y profesionales.
Una disculpa genuina implica humildad, empatía y esfuerzo por enmendar el daño causado. Reconocer los errores y disculparse adecuadamente también muestra su disposición a aprender y crecer como individuo.
No solo fortalece el vínculo con la persona con la que se disculpa, también ayuda a mantener la integridad y la autenticidad en todas sus interacciones.
En el video adjunto encontrará cinco pasos que lo guiarán sobre cómo disculparse como un adulto con la ayuda del psicólogo Rafael Ramos.
A Ramos lo encuentra en sus redes sociales como @dr.rafaelramosa o al WhatsApp 8881-1304.