Por primera vez, Begoña Gómez se refirió públicamente a la investigación que se le sigue por presunta corrupción. Lo hizo ante una comisión del Parlamento regional de Madrid, dirigido por la derecha.
Begoña Gómez es sospechosa de haber aprovechado el cargo de su marido para conseguir favores de empresas, en particular de las de Juan Carlos Barrabés.
Begoña Gómez alega que el magistrado "ha adoptado decisiones judiciales arbitrarias y manifiestamente injustas" contra ella en su investigación "inusual, errática y prospectiva".
La acusación considera que el juez Juan Carlos Peinado podría haber incurrido en hechos de "carácter delictivo" en su citación, en la que requirió interrogar al presidente del Gobierno español en persona.
El presidente del Gobierno español se acogió a su derecho a no declarar en la investigación contra Begoña Gómez, su mujer, por presunta corrupción y tráfico de influencias.
Desde el principio de la investigación, el presidente del Gobierno de España ha defendido la inocencia de su esposa Begoña Gómez en este asunto, que ha llevado a la oposición a arreciar sus ataques.
A Begoña Gómez se le acusa de presunta corrupción y tráfico de influencias.
Un medio digital reveló que en la pesquisa se examinan los vínculos de Begoña Gómez con varias empresas privadas, que acabaron recibiendo fondos y contratos públicos del gobierno.
