Vecino que encontró a sacerdote: “Estaba golpeado, todo ensangrentado, con trapos en la boca”
Con brutal violencia, dos sujetos irrumpieron en la casa cural, andaban con pasamontañas y ambos portaban armas de fuego.
Dos delincuentes armados asaltaron la iglesia católica de Campo 2 de Cariari, Limón, vapulearon al sacerdote, lo amordazaron, robaron 600 mil colones en efectivo, computadoras y celulares.
Eran las 10 de la noche de este domingo cuando ocurrió el delito.
Los dos antisociales andaban con pasamontañas y ambos portaban armas de fuego.
Ellos llegaron hasta la casa cural e inmediatamente atacaron al sacerdote.
“Al ser casi la medianoche, feligreses de la parroquia se enteraron del ataque y fueron a auxiliarlo, lo habían maniatado de pies y manos, la boca con un montón de trapos metidos, él a como pudo, salió y pegó gritos, por dicha lo escucharon”, explicó Carlos Losano, sacerdote.
“Yo me di cuenta por una amiga, me vine rápido y cuando llegué me lo encontré golpeado, todo ensangrentado, con los trapos en la boca, inflamado de los golpes, de inmediato pedí ayuda al 9-1-1”, relató un vecino bajo identidad protegida.
Este domingo hubo diversas actividades en honor al santo patrono, San Isidro Labrador, entre ellas, una subasta.
En el evento se recaudaron fondos para mejoras en la iglesia y los ladrones iban por ese dinero.
“Fueron dos asaltantes, buscaban dinero, por eso lo golpearon porque él no tenía el dinero, entraron con violencia, se le llevaron la pantalla, el celular personal y el celular de la parroquia, así como dos computadores, la personal y la del despacho parroquial”, agregó Losano.
El sacerdote vive solo en la casa cural y fue brutalmente agredido como lo informó monseñor Javier Román.
“Pareciera que ese fue el móvil, porque tuvimos fiestas con actividades y se había logrado el presupuesto para la parroquia, es una parroquia reciente y el sacerdote que está, se encuentra solo”, acotó el presbítero.
“Nos tiene a todos consternados por el hecho de la agresión y que sea al sacerdote, consecuencia de todo lo que ocurre en la comunidad, una inseguridad de problemas de drogas, delincuencia, asaltos y ahora sufriendo las consecuencias nuestro querido sacerdote”, contó una mujer bajo identidad protegida.
El sacerdote víctima del asalto fue trasladado al centro médico con múltiples lesiones.
El OIJ llegó al lugar y realizó la recolección de indicios.
Miembros de las diferentes fuerzas vivas de la comunidad se hicieron presentes a la iglesia y ofrecen su colaboración para dar más seguridad a la casa cural y el sacerdote.