24 de junio de 2016, 16:00 PM

Las autoridades judiciales de Nicaragua resolvieron en menos de 7 meses, tres procesos penales que tuvieron relevancia en nuestro país.

¿Por qué esa ligereza no ocurre en Costa Rica?

El primero de los casos ocurrió el 3 de diciembre del año anterior cuando se detuvo a la modelo costarricense Kathya Adriana Corella, ligada a la banda de Los Cacique.

Siete meses han pasado. Y ya fue declarada culpable y está a la espera que que se imponga la pena.

El 23 de enero en Nicaragua naufragó un barco donde fallecieron 13 costarricenses.

El capitán identificado como Hilario Blandón, se declaró culpable y fue condenado.

El otro caso fue el de Adrian Salmerón, quien el 14 de febrero asesino a una familia en Matapalo de Guanacaste, fue detenido en Nicaragua. A cuatro meses de los hechos se declaró culpable.

Para abogados y exjueces, es evidente que los procesos judiciales en Nicaragua son más expeditos.

Existen varias razones.

Fallos de los magistrados, garantías y tipos de defensas son otros aspectos que los litigantes consideran.

Para el fiscal general de la República Jorge Chavarría. Mucho radica en que Nicaragua no tiene etapa intermedia.

Además considera que el proceso penal costarricense debe someterse a una reforma.

El fiscal general y los abogados aseguran que Nicaragua respeta las garantías de los imputados. Y no incide en que los procesos judiciales sean más rápidos.