Conapam podrá ubicar adultos mayores abandonados en todos los hogares de bienestar social
Anteriormente, solo 17 albergues estaban aprobados por las autoridades y recibían la totalidad de los recursos.
El Consejo Nacional de la Persona Adulta Mayor (Conapam) empezará a recibir ciudadanos de oro del programa "Abandonados" en todos los hogares de bienestar social autorizados.
Anteriormente, solo podían ubicarlos en 17 albergues que daban el servicio aprobado por las autoridades y recibían la totalidad de recursos para ese fin. En caso de que estos se quedaran sin campo, la institución debía pagarles a hogares privados con fines de lucro para que los recibieran, en lugar de ubicarlos en otros de bienestar social. ¿Por qué? Por la simple razón de no contar con una "adenda".
Yolanda Benavides, gerente de un hogar de ancianos en Alajuela, contó su experiencia al no ser tomados en cuenta para este programa, aún teniendo cinco camas disponibles.
"Cuando había un adulto mayor abandonado, el juez ordenaba al Conapam que tenía que atenderlo; pero, si llegaba y le preguntaba a esas 17 organizaciones si tenían campo y decían que no, entonces ahí optaban por ingresarlos a hogares con fines de lucro. Nosotros no podíamos ofrecer las camas convencionales de albergue", contó a Teletica.com.
¿Por qué eran solo 17?
En principio, según Benavides, se les dio permiso únicamente a aquellos centros que tenían condiciones para atender a pacientes con este perfil. Con el paso del tiempo, esa idea se desvaneció, pero no cambiaron las condiciones.
"Al inicio, se dijo que muchos de esos adultos mayores eran personas en condición de calle, alcoholismo o que tenían grados de dependencia muy grandes, y que muchas organizaciones no tenían las condiciones para recibirlos; pero con el tiempo se dieron cuenta de que no siempre eran de ese perfil. Muchos eran simples adultos mayores que terminaban en los hospitales porque los abandonaron", añadió la vocera.
La parte que les molestaba era que, pese a que ellos tenían espacio disponible, el Estado pagaba hogares caros y con fines de lucro para recibir a los adultos mayores, y no a ellos que "sinceramente, necesitaban el dinero".
"La parte dolorosa es que nosotros, siendo organizaciones de bien social en donde los recursos son tan limitados, estos recursos fueran a dar primero a una entidad con fines de lucro, que no sabemos hasta dónde reinyectan el recurso. A ellos se les acabó la piñata", concluyó Benavides.
Este sistema cambió con la entrada del nuevo presidente de la institución, Norbel Román, quien eliminó la "adenda" para el programa.