Ucrania protesta por los gritos de 'nazi' al futbolista Roman Zozulya
El domingo, Zozulya, recibió gritos de "nazi" por parte de aficionados del Rayo Vallecano, en un partido que fue interrumpido y luego suspendido por esta razón.
Ucrania denunció este lunes un incidente "inaceptable" hacia el internacional Roman Zozulya, delantero del Albacete, club de la segunda división española, que el domingo recibió gritos de "nazi" por parte de aficionados del Rayo Vallecano, en un partido que fue interrumpido y luego suspendido por esta razón.
La portavoz de la diplomacia ucraniana Kateryna Zelenko pidió en un comunicado a las autoridades española "reaccionar" hacia los "insultos vergonzosos e infundados".
El embajador ucraniano en España denunció en Facebook "una provocación".
"Xenofobia, incitación al odio inter-étnico y 'hooliganismo' brutal", señaló también en Facebook el presidente de la Asociación Ucraniana de Fútbol Andrii Pavelko.
El domingo, una parte de los aficionados del Rayo gritó "Zozulya es un nazi", entre otros insultos, durante la primera parte, por lo que el árbitro José Luis López Toca decidió interrumpir el partido durante unos minutos.
Entonces se difundió un mensaje sonoro en el estadio para pedir que cesaran estos insultos.
El partido se reanudó, pero en el descanso los futbolistas del Albacete se negaron a seguir jugando, solidarizados con su compañero insultado.
Zozulya fue cedido al Rayo en 2017 por el Betis, pero parte de la hinchada vallecana presionó para que la operación no se completara esgrimiendo que el internacional ucraniano de 30 años tenía vínculos con la ultraderecha.
El jugador, que explicó que simpatizaba con el ejército ucraniano, al que hizo donaciones económicas, en el conflicto contra los prorrusos pero negó cualquier relación con la extrema derecha, tuvo que volver al Betis y posteriormente fichó por el Albacete.
En 2016 incluso subastó su medalla por participar en la Liga Europa y donó los cerca de 8.000 dólares obtenidos a una fundación que apoyaba al ejército.
Un año antes publicó en Twitter una foto con una bufanda en la que aparecía el rostro de Stepan Bandera, líder de los nacionalistas ucranianos en los años 1930 y 1940, y figura controvertida, al haber brevemente combatido a la Alemania nazi, pero también haber colaborado con ella.