Queman miles de libros de niños en Canadá por tener contenido racista y discriminatorio
Un Gobierno local en Ontario retiró 156 títulos de las bibliotecas de 30 escuelas; entre ellos, los libros 'Astérix y Obélix', 'Tintín' y 'Lucky Luke'.
Alrededor de 5.000 libros, entre ellos, 'Astérix y Obélix', 'Tintín' y 'Lucky Luke' fueron quemados en Canadá por ser considerados racistas y discriminatorios.
La Junta Escolar católica de Providence (Ontario) decidió retirar unos 156 títulos de las bibliotecas de 30 escuelas por mostrar imágenes estereotipadas de los grupos indígenas,racismo.
ya que caían en elLos títulos que fueron quitados incluyen: 'Tintín', 'El Templo del Sol', 'Astérix', 'Lucky Luke' y hasta 'Pocahontas' de Disney por “tener contenido desactualizado o inapropiado en referencia al tratamiento de personajes indígenas", según Lyne Cossette, portavoz del consejo escolar.
Durante el 2019 se realizó una ceremonia simbólica denominada “purificación de llamas” donde se quemó, arrojó y enterró unos 30 libros. El acto llevado a cabo por el comité de la Junta Escolar, el cual reunió a guías nativos para analizar los títulos, destacó la quema como un hecho simbólico que busca “enterrar las cenizas del racismo, la discriminación y los estereotipos con la esperanza de crecer en un país inclusivo donde todos puedan vivir en prosperidad y seguridad”.
Para el comité, 'Tintín' contiene un lenguaje inaceptable, desinformativo y a la vez hace una representación negativa de los pueblos aborígenes e incluso su tergiversación. 'Lucky Luke' fue retirado por el desequilibrio de poder, ya que, según el comité, los nativos son percibidos como los malos. A 'Astérix' lo consideran salvajismo sexual, ya que exterioriza una imagen de las mujeres indígenas como mujeres fáciles.
Justin Trudeu, primer ministro de Canadá, considera que “no corresponde a los no indígenas decirles a los indígenas cómo deben sentirse”. Además, ha dicho que no respalda la iniciativa porque "nunca estaría de acuerdo" con la quema de libros.
El caso de 'Cocorí' en Costa Rica
En el año 2015, la diputada Epsy Campbell dijo que había racismo impreso en el libro 'Cocorí' y adujo que no debía leerse en escuelas y colegios. La obra de Joaquín Gutiérrez fue considerada racista y discriminatoria de la etnia afrodescendiente costarricense.
Campbell interpuso un recurso de amparo contra el Ministerio de Educación Pública (MEP), para que el libro no figurara entre las 109 lecturas opcionales del Segundo Ciclo. Los magistrados de la Sala Cuarta declararon, por mayoría, sin lugar los recursos de amparo presentados contra este título.
Concluyeron que no se logró demostrar que el libro 'Cocorí' genere en la población afrodescendiente actos de discriminación racial indirecta en los centros educativos.