Futbolista del Flamengo, Bruno Henrique, blanco de operación policial por posible amaño
La policía explicó que se indaga la "posible manipulación del mercado de tarjetas en un partido de fútbol por el Campeonato Brasileño de la Serie A".
La policía brasileña ejecutó este martes una operación que investiga si el futbolista Bruno Henrique, del Flamengo, forzó una tarjeta durante un partido del campeonato liguero para beneficiar a parientes suyos en apuestas deportivas.
"Bruno Henrique es uno de los blancos de la operación", confirmó a la AFP el Grupo de Actuación Especial de Combate al Crimen Organizado (GAECO), que desarrolló la llamada Operación Spot-fixing junto a la Policía Federal.
Las autoridades policiales explicaron en una nota que se indaga la "posible manipulación del mercado de tarjetas en un partido de fútbol por el Campeonato Brasileño de la Serie A".
Las sospechas se refieren a un juego que Flamengo perdió 2 a 1 contra Santos, en noviembre de 2023, en el que el delantero recibió una tarjeta amarilla por una falta y vio después una segunda por ofender al árbitro, por lo que fue expulsado.
La PF informó que los "datos obtenidos de las casas de apuestas" indicaron que las apuestas sospechosas "habrían sido hechas por parientes del jugador y por otro grupo que aún está bajo investigación".
Además de Bruno Henrique, de 33 años, todos los presuntos apostadores son blanco de la operación, que indaga si se violó la incertidumbre del resultado deportivo, un delito pasible de una pena de dos a seis años de prisión.
En su cuenta de X, el club más popular de Brasil comunicó que "al mismo tiempo que apoyará a las autoridades, dará total respaldo al atleta Bruno Henrique, que goza" de su "confianza".
Según el club carioca, Bruno Henrique "sigue ejerciendo sus actividades normalmente" y este martes viajará junto al equipo a Belo Horizonte, donde disputará el miércoles un partido contra Cruzerio.
La Operación Spot-fixing incluyó doce órdenes de allanamiento e incautación en Río de Janeiro y en cuatro ciudades del estado de Minas Gerais, en el sureste del país, donde nació Bruno Henrique.
Según la prensa local, el hermano, la cuñada y la prima del jugador habrían creado cuentas en casas de apuestas virtuales el día antes del partido y habrían apostado por una amonestación del futbolista, un patrón que también fue detectado en cuentas de otros seis sospechosos.
Las órdenes de allanamiento incluyeron la casa del jugador en Río de Janeiro, así como su habitación en el centro de entrenamiento de Flamengo, según medios.
Las sospechas sobre partidos amañados han sacudido al fútbol brasileño, con investigaciones que apuntan a clubes grandes de la liga más poderosa de Sudamérica. El Congreso creó una comisión especial para indagar sobre el tema.