Fiscalía pone en duda hipótesis de homicidio de Luz Raquel Padilla
El fiscal dijo que la mujer compró dos botellas de alcohol en una farmacia y un encendedor en otro negocio.
La Fiscalía del estado mexicano de Jalisco (oeste) puso en duda la hipótesis de un homicidio en el caso de una activista que murió el pasado 19 de julio a causa de graves quemaduras.
En rueda de prensa, el fiscal Luis Méndez hizo un recuento de los desplazamientos que realizó Luz Raquel Padilla el 16 de julio, cuando según un reporte policial -citado inicialmente por su despacho- fue prendida en fuego por cuatro personas que previamente le rociaron alcohol.
Citando a testigos y exhibiendo imágenes de videovigilancia, el fiscal dijo que ese día Padilla, de 35 años, compró dos botellas de alcohol en una farmacia, y luego un encendedor en otro negocio de la localidad de Zapopan.
"Tenemos una entrevista (...) por parte de una persona que nos reconoce y nos señala a Luz Raquel como a la misma persona que le vende las dos botellas con alcohol", indicó el funcionario.
"Se cuenta también con una entrevista por parte de la persona que reconoce (...) haberle vendido un encendedor, que concuerda con las características del que fue localizado en la escena", añadió.
Según Méndez, posteriormente Padilla fue vista envuelta en llamas, pidiendo auxilio, en un parque, por feligreses que salían de misa, algunos de los cuales intentaron auxiliarla.
La mujer, madre de un niño autista e integrante de un colectivo de cuidadores de personas con necesidades especiales, murió por las quemaduras que sufrió en el 90% del cuerpo.
El fiscal evitó hacer interpretaciones sobre el caso, que es investigado como un posible feminicidio.
La muerte de Padilla, atribuida originalmente a una agresión, fue condenada por la oficina en México de ONU Mujeres, así como por el presidente Andrés Manuel López Obrador y organizaciones de derechos humanos que evocaron la crisis de feminicidios que vive en país desde la década de 1990.
El domingo último, Margarita Seceña, de 31 años, murió tras haber sido quemada por familiares el pasado 1 de julio en medio de una disputa económica en el central estado de Morelos.
Morelos informó que obtuvo órdenes de captura para los cuatro presuntos agresores de Seceña, acusados de feminicidio.
Padilla había denunciado a su expareja por violencia familiar, y en mayo a un vecino por amenazas mediante pintadas en las paredes del edificio donde vivía.
"Te voy a quemar viva", señalaba uno de esos mensajes difundido por la mujer en sus redes sociales. Tras ser detenido, el hombre fue acusado la semana pasada por la fiscalía de amenazas en relación con la denuncia de Padilla.