Lucía Pineda: "En Nicaragua habrá asignaciones, no elecciones"
La periodista y expresa política cuenta algunos de los métodos preferentes del dictador Daniel Ortega para controlar los comicios electorales. Hoy se postula por cuarta vez a la presidencia.
Lucía Pineda es una periodista nicaragüense quien, durante el 2018, hizo una cobertura periodística sobre el régimen de represión de Daniel Ortega y Rosario Murillo a raíz de las manifestaciones nacionales que ocurrieron en ese país.
Por esa razón, el 21 de diciembre de ese mismo año, mientras transmitía un programa en vivo, la policía sandinista invadió el canal donde trabajaba, 100% Noticias, confiscando y robando las instalaciones. De allí la llevaron a ella y a otros periodistas de ese medio a la cárcel de tortura El Chipote, que existe desde la época de la dictadura de Anastasio Somoza y que es una de las herencias antidemocráticas de ese régimen que todavía pesan sobre la imagen del país centroamericano.
Estuvo en prisión 6 meses y fue liberada como parte de un acuerdo de amnistía que firmó Ortega en 2019. Gracias a su trabajo, fue galardonada con el Premio Coraje en Periodismo de International Women’s Media Foundation y el Premio a la Libertad de Prensa 2019 del Comité de Protección de Periodistas.
Ahora, vive y trabaja en el exilio desde Costa Rica y, ante las elecciones que se celebran hoy en ese país, comparte los puntos más importantes a destacar sobre la campaña política de este año.
Lucía Pineda y Miguel Mora, ambos fueron encarcelados por su trabajo periodístico en 2018.
Estas son las cuartas elecciones de Daniel Ortega. ¿Cómo ha hecho para llegar hasta aquí?
Daniel Ortega ha estado de elección en elección desde que tomó el poder en 2007. Él ha sido el único candidato del frente sanidinista. Cuando retoma el poder hace su gobierno más familiar. Todos sus hijos, la mayoría, tienen una función pública. Él delega a sus hijos los temas de inversión y de farándula, incluso. Su hija, Camila, se dedica a montar 'shows' en nombre del Gobierno.
Hay una gran concentración del poder en una sola familia. Las instituciones en Nicaragua las domina Daniel Ortega. Él, además de ser el presidente, también es el presidente de la Corte Suprema de Justicia, es el Juez, el Jefe de la Policía, el Jefe del Ejército. Es el Jefe del Consejo Supremo Electoral--él es el jefe de todo.
Allá hay un dicho famoso entre funcionarios: "son órdenes de arriba". Ya todos saben que esas son órdenes de Daniel Ortega y de Rosario Murillo. Así es como él ha conseguido acaparar las decisiones más importantes y, por lo tanto, mantener un tallado control sobre lo que ocurre en el país en todos los niveles.
Una valla publicitaria en Nicaragua de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
¿Qué medidas ha implementado Ortega recientemente en vista a las elecciones de hoy?
En estos últimos meses se aprobó un paquete de leyes represivas--así le llamamos nosotros, las leyes represivas. La dictadura las hizo para encarcelar, intimidar y oprimir a los opositores.
La primera es la ley de soberanía o traición a la patria. Es la ley número 1056 y es la que le están aplicando actualmente a la mayoría de los opositores. Si un ciudadano nicaragüense solicita sanciones para Nicaragua, ellos criminalizan a esa persona, la encarcelan y le abren un proceso por conspiración y traición a la patria. Incluso si vos, como ciudadano, celebrás una sanción internacional a Nicaragua, ya estás en riesgo.
Por ejemplo, si sale un titular que dice 'Sancionaron a Rosario Murillo' y alguien lo comparte en redes diciendo 'Qué alegre que la sancionaron', entonces ya son sujetos a ser castigados con esta ley. El castigo es la cárcel, pero no existe lineamiento concreto porque al final ellos castigan a los acusados a su antojo.
La segunda de las cinco leyes que implementó en vistas a las elecciones es la ley de ciberdelitos. Se la aplicaron a una abogada defensora de los derechos humanos, María Oviedo, quien hizo informes sobre las violaciones de estos derechos en Nicaragua. A ella la acusaron por supuestamente dar declaraciones falsas este año y ahora está presa.
La tercera es la nueva ley de agentes extranjeros. Esta la han utilizado para entorpecer el trabajo humanitario de las Organizaciones No Gubernamentales (ONG) en el país. Esta ley inhabilita y castiga a los nicaragüenses que trabajen en una ONG. Ya han eliminado unas 50 oenegés con esta ley y les han quitado la personería jurídica. Con este mecanismo han eliminado oenegés de médicos, asociaciones humanitarias, organizaciones ambientalistas o de derechos humanos. Ahorita hay unas 40 personas presas por esta razón.
Además, Ortega hizo una reforma al Código Procesal Penal nicaragüense. Ampliaron el periodo de detención provisional mientras se aclaran las circunstancias y medidas jurídicas de los detenidos. Antes, cuando se detenía a una persona, el plazo de espera era de 48 horas. Con este cambio, ahora el plazo es de 90 días. Eso significa que pueden encarcelar a una persona por hasta 90 días mientras investigan si hay suficientes pruebas para penarla. Aunque sea por una simple sospecha antojadiza e infundada, el Gobierno ahora puede encarcelar a un ciudadano sin pruebas por hasta tres meses.
¿Considera que estas elecciones son históricas?
Estas sin duda son las elecciones en las que Ortega ha sido más agresivo. Porque está claro que si deja el poder, iría a la cárcel. Así que él y Rosario Murillo tomaron una decisión: el poder o la muerte. Ellos piensan quedarse en el poder, no lo quieren soltar.
Es inédito que estén presos los opositores, los precandidatos que le iban a ganar a Daniel Ortega. Hay 7 precandidatos presos, 5 de ellos en el Chipote, la cárcel de torturas que se estableció en los tiempos de Anastasio Somoza.
Este proceso será único porque es una farsa, no habrá sorpresas. Todos saben que Daniel Ortega se va a 'asignar' la presidencia y que Rosario Murillo se va a 'asignar' la vicepresidencia. Lo que habrá son asignaciones, no elecciones.
¿Si todo está "montado", entonces en qué consisten las elecciones?
Hay unos cinco partidos (Liberal Constitucionalista, fundado por el expresidente Arnoldo Alemán, el partido Liberal Independiente, el partido Camino Cristiano o Alianza por la República, entre otros). Las cabezas de estos partidos saben que no van a ganar las elecciones. Existen porque tienen su personería jurídica, ya que el Consejo se las conserva aunque no tengan seguidores. Para que te des una idea, este año no consiguieron llenar la lista de candidatos, entonces comenzaron a llenarlas con familiares y amistades, porque no tienen gente.
Por lo tanto, ahora hay seis candidatos. Daniel Ortega y los cinco representantes de estos partidos que te comento. ¿Qué ocurre el día de las elecciones? Sí habrá una 'votación' y habrá gente haciendo fila. ¿Pero quiénes serán los que hagan fila hoy? Los simpatizantes de Daniel Ortega y los trabajadores del Estado, empleados públicos, que lo harán obligados. Los votantes de estas elecciones serán sandinistas y el grupo de 'los obligados', que son los empleados públicos. Si no votan, los amenazan y luego ellos tienen que probarle al Gobierno que votaron.
Los votos los cuenta el Consejo Supremo Electoral, compuesto solo por magistrados sandinistas. Todos son declarados 'Danielistas', ahí no hay independencia de poderes ni separación entre el partido sandinista y la institución.
Para hacer el show de que estas son unas elecciones 'soberanas', invitaron a sus amistades políticas de otros países para que llegaran a acompañarlos a ver el proceso. Estos son turistas electorales, políticos afines a Daniel Ortega de varios países del mundo, pero es gente que uno ni la conoce, porque son todos simpatizantes bastante desconocidos.
Verás a gente haciendo fila desde temprano, incluso ya lo han hecho en anteriores elecciones, que ponen a gente a votar en Managua durante la mañana y luego por la tarde votan por segunda o tercera vez en León o en Granada. Todo con el fin de que se vean filas y participación.
Ahora el problema que tiene Ortega es que, para que el número que ya tiene preparado el Consejo Supremo Electoral calce con las imágenes, es que la gente salga. Que se vea a gente en los centros de votación, esta es una de las razones por las cuales la oposición no saldrá a votar hoy.
Seguramente saldrán con estos números, te lo digo porque con los años uno ya conoce el modus operandi; dirán que dos millones de nicaragüenses votaron y que, de esos, millón y medio le concedió el voto al partido de Daniel Ortega. Los 500.000 votos restantes se los repartirán entre los 'zancudos', es decir, los partidos cómplices.
¿Ve usted alguna solución al alcance?
Tendría que pasar un gran milagro. Yo apuesto al milagro de la libertad, porque ya los nicaragüenses han hecho lo humanamente posible para demostrar que no quieren esta dictadura. El mundo también ya se ha pronunciado con sanciones. Pero ellos están apostando al poder o la muerte, no van a ceder. Aquí lo único que nos puede salvar es un milagro de Dios. ¿Cómo lo va a hacer Dios? Yo no lo sé. Lo que nos toca, mientras tanto, es resistir.