Panamá cierra tres pasos no autorizados en selva del Darién
El objetivo es "canalizar" el flujo de migrantes para un mayor control de la migración masiva a través de esa ruta irregular, aseguraron las autoridades.
Panamá cerró al menos tres de los pasos que utilizan los migrantes para cruzar el Darién, que marca la frontera con Colombia, con una "barrera perimetral", con el objetivo de "canalizar" su flujo para ejercer un mayor control sobre esta ruta irregular que utilizan cientos de personas a diario en su camino hacia Norteamérica, informaron este miércoles (03.07.2024) las autoridades panameñas.
El Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) señaló en un comunicado que "se tomaron medidas para el control de la migración irregular masiva que enfrenta el Estado panameño" con el fin de "canalizar la migración irregular" hasta Bajo Chiquito, el primer poblado al que llegan los migrantes tras atravesar durante días la selva del Darién a pie.
Esas medidas, detalló, se basan en bloquear "tres pasos no autorizados que utilizan los migrantes irregulares, que se identifican como los pasos por la costa pacífica y costa caribe (...), así como los pasos terrestres que dan acceso al sector del Hito de Chucurti, este último fue bloqueado con barreras perimetrales que impiden el paso de los migrantes".
Tráfico de personas y cobros del crimen organizado
Según explicó el Senafront, "con el anterior control se disponían de fuerzas de seguridad en múltiples puntos lo que dispersaba la eficiencia en la lucha contra las organizaciones delictivas transnacionales que se benefician del tráfico de personas, de cobros ilícitos y otros delitos conexos a esta población vulnerable".
En declaraciones al diario local El Siglo, el ministro de Seguridad Frank Ábrego, aseguró el fenómeno migratorio que ocurre en Panamá es parte de una red criminal que inicia en Colombia con el control total de la actividad por parte del Cartel del Golfo, generándole al grupo delictivo "alrededor de 100 millones de dólares en ganancias”.
Hasta ahora muchos migrantes solían denunciar ser víctimas de robo o violaciones por parte de bandas criminales a lo largo del Darién.
Casi 200.000 migrantes han cruzado este año
El nuevo presidente de Panamá, José Raúl Mulino, ya adelantó el pasado viernes, durante una gira al Darién previa a su investidura, la colocación de "cercas de serpentinas" con "el ánimo de que la gente tome el camino único para llegar hasta aquí, no diseminado", además de la presencia policial en algunas zonas de esa selva.
El cierre de esos pasos no autorizados o trochas se da en medio de un gran flujo de migrantes por esa selva del Darién, por la que este año han cruzado más de 195.000 personas, la mayoría venezolanos, mientras que en 2023 fueron más de 520.000, una cifra inédita, según datos oficiales.
Mulino también se refirió a la problemática en Darién durante su discurso de investidura el pasado lunes, día en el que Panamá y Estados Unidos, principal destino de los migrantes, firmaron un acuerdo para repatriar a los transeúntes, para lo que el país norteamericano se comprometió a cubrir los gastos.