26 de mayo de 2014, 5:45 AM

Hofesh significa “libertad” en hebreo y además es el nombre de una tortuga que sufrió la amputación de dos de sus aletas. Sin embargo, pese al desafortunado suceso, hoy la vida del animal ha cambiado.

Tras quedar atrapada en una red de pesca hace cuatro años, esta tortuga marina verde quedó “desequilibrada” e incapaz de nadar en su hábitat natural.

No obstante, la creatividad de un estudiante de diseño israelí la dotó de dos nuevas “alas de agua” que se adhieren a su espalda y le permiten tener la estabilidad necesaria para volver a nadar.

Estas aletas le dan una apariencia algo futurista, y son inspiradas en el diseño de un avión de combate F-22 Raptor.

Por el material de que están hechos, las “alas” crecerán con Hofesh, que continuará desarrollándose hasta alcanzar la adultez.

Pese a ello, la tortuga no podrá ser liberada en el mar, pues no sería capaz de sobrevivir en aguas abiertas. Eso sí, en su estanque se le nota a gusto recuperando la capacidad de desplazarse.