¿Fraude con la famosa zapatilla de Cenicienta?
"Mientras que Cenicienta podría haber permanecido de pie con sus zapatos, sin importar el tamaño del tacón, no se puede decir lo mismo si hubiera intentado caminar o correr", dice un estudio.
Un grupo de estudiantes de la Universidad de Leicester, en el Reino Unido, se dio a la tarea de desmitificar el cuento de hadas de la Cenicienta, la afamada historia escrita en 1697 por el francés Charles Perrault y que Disney lanzó a la fama en 1950.
El foco de atención de los estudiantes fueron las zapatillas de cristal que ella usó en la fiesta de gala en el palacio del príncipe. En su huida a la medianoche, ella dejó tirada una.
En la investigación, publicada en Journal of Physics Special Topics - especializada en trabajos de estudiantes que relacionan la ficción y la realidad y en la que caben curiosidades pero no adelantos científicos-, los jóvenes aplicaron ecuaciones para medir la resistencia del zapato y el peso de ella de pie y en movimiento.
También midieron la fuerza del cristal y hasta partieron del supuesto de que Cenicienta pesaba 55 kgs y su talla de zapato era 32.
"Mientras que Cenicienta podría haber permanecido de pie con sus zapatos, sin importar el tamaño del tacón, no se puede decir lo mismo si hubiera intentado caminar o correr", explicaron en el estudio, informa el diario español ABC.
Quizás, a lo sumo, Cenicienta pudo haber salido corriendo a la medianoche con un tacón con un máximo 1,15 centímetros, algo que en el cuento no ocurre, explicaron.
Mervyn Roy, uno de los profesores responsables de este trabajo, aseguró a National Geographic: "Solo hay un mundo real, pero una vez que te fijas en la ficción, hay un reino enorme de cosas por explorar".
Al final, pensará usted, solo se trata de un cuento de hadas y, como tal, todas las licencias están permitidas... hasta correr con zapatillas de cristal.