La historia detrás de los desfiles del 14 y 15 de setiembre
En la celebración de los 201 años de Independencia, los desfiles escolares inundan las calles de todo el país.
Este 15 de setiembre, día en el que se celebran 201 años de la Independencia de Costa Rica, los desfiles escolares inundan las calles de todo el territorio nacional. Además, un día antes, como de costumbre, al final de la tarde, se realizaron los tradicionales desfiles de faroles.
Todas estas festividades tienen una razón de ser. Así lo explica Vladimir de la Cruz de Lemos, político, historiador y profesor universitario.
“En las fiestas escolares alrededor de la Independencia, se hacen actos conmemorativos de la noticia de la Independencia del 15 de setiembre de 1821. Se hacen festividades donde se preparan vestidos, indumentarias de los muchachos, actividades escolares relacionadas y se hacen desfiles que son conmemorativos de la noticia de la llegada”, detalló el historiador.
El desfile de faroles hace alusión a una serie de hechos que ocurrieron el 14 de setiembre de 1821. Ese día, Dolores Bedoya corrió por todas las calles de Guatemala, ahora Antigua, con un farol en sus manos y buscando a los ciudadanos para que se congregaran en la plaza, frente al cabildo, donde estaban reunidas las diputaciones provinciales de Guatemala, entre ellas Chiapas, Honduras y El Salvador.
El objetivo de los habitantes guatemaltecos era vociferar en una sola garganta "Viva la Patria" y "Viva la Libertad", a pocas horas de declarada la independencia de esa nación.
“La gente allá se movilizaba de día y de noche para presionar en los palacios de los capitanes, para que se proclamara la independencia. Además, estuvo asociado a las movilizaciones de mujeres de Dolores de Bedoya, quien era la esposa del doctor Pedro Molina (considerado uno de los iniciadores del pensamiento liberal en Guatemala)”, mencionó el político.
El pueblo entero se dio cita en el ayuntamiento con sus lámparas y faroles, pues en esa época no había electricidad. Ahí, con sus llamados y presiones, lograron que los patricios estamparan la tan deseada firma.
Para el profesor universitario, los faroles también tienen un gran simbolismo: el fuego.
“Los desfiles de faroles son el símbolo de las movilizaciones populares y de mujeres que se hicieron en Guatemala, pero también pueden significar libertad por la luz, de la independencia, frente a la oscuridad de la opresión colonial. La luz del ciudadano frente a la oscuridad del vasallo y súbdito”, concluyó.
En la actualidad, en nuestro país, cada año miles de niños preparan con anticipación, con mucho cariño y dedicación su farol para mostrarlo con gran orgullo el 14 de setiembre.