Tristeza y optimismo se mezclan en la demolición del Rosabal
De cumplirse el cronograma de construcción, Herediano estrenará nueva casa en el último trimestre del 2021.
El Club Sport Herediano retomó esta semana las obras de demolición de las graderías este y norte del estadio Rosabal Cordero.
Según el presidente de Fuerza Herediana, Juan Carlos Retana, los sentimientos de nostalgia y al mismo tiempo de ilusión se encuentran en esta fase constructiva.
“Son sentimientos encontrados, ha sido la casa para muchos de nosotros y donde nos hemos convertido en la familia que somos con alegrías, victorias, derrotas, sueños, hemos encontrado amigos, novia, esposa en esas graderías, de ese lado está la tristeza.
“Por otro está el optimismo, la esperanza, la alegría, de una casa nueva y renovada que se ha ampliado para albergar a más familias, es lo que pasa con todo, nuestro hogar no se muda, se rejuvenece”, comentó Retana.
La gradería este que da al Palacio de los Deportes, así como la sur, serán las primeras en desaparecer del escenario florense, donde se montarán los cimientos del nuevo Rosabal.
“Toda la estructura prefabricada del sector este llegará a mediados o finales de setiembre para montarla nada más. La gradería norte también se botó porque en esa parte, como la cancha no se va a tocar, servirá como bodega”, explicó el jerarca.
La infraestructura que fabrica en Guatemala llegará en su mayoría vía terrestre y en las próximas semanas empezarán a llegar grúas especiales necesarias para la instalación.
“Los atrasos que hemos tenido son por temas de pandemia tanto en el país como en Guatemala, tenemos que jugar con ambas situaciones”, acotó Retana.
Si el cronograma de construcción se cumple como hasta el momento, el nuevo Rosabal Cordero abriría sus puertas en el último trimestre del 2021.