"Si las cosas continúan así, todos en hospital morirán”: catastrófica situación en centro médico de Gaza
Naciones Unidas estima que 2.300 personas aún se encuentran en el complejo de Al-Shifa, entre pacientes, personal médico y desplazados.
La noche del pasado martes las fuerzas israelíes ingresaron a los edificios del hospital Al Shifa, el más grande de Gaza, que alberga a cientos de pacientes en situación crítica y donde se refugian miles de personas.
La BBC habló con el director del centro médico, Muhammad Abu Salmiya, quien describió la situación dentro del hospital como catastrófica y trágica.
“El ejército israelí está por todas partes en el hospital, eso sumado a que ayer por la mañana comenzó una operación de barrido en las zonas norte y oeste del hospital, incluida la zona del departamento de quemados, la farmacia central y la unidad de diálisis”, afirmó.
El ejército ingresó a los edificios, luego de que las inteligencias israelí y estadounidense afirmaran que Hamás había utilizado el hospital como centro de mando.
Uno de los comandantes de la operación dijo que en total habían encontrado unas 15 armas de fuego, además de algunas granadas, folletos militares y un mapa que, según él, marca posibles rutas de entrada y salida del hospital.
El grupo militante palestino, por su parte, negó haber utilizado el hospital para sus operaciones, pidió que un comité internacional lo inspeccionara y dijo que los comentarios de la inteligencia estadounidense habían proporcionado "luz verde" para que Israel lanzara su ataque.
Lo cierto es que la situación en el hospital es cada vez más crítica. Así lo ha denunciado el personal médico, la Organización Mundial de la Salud, la ministra de Salud de Gaza y recientemente el director del centro.
“La situación sigue siendo trágica y se vuelve más trágica a medida que el hospital está completamente asediado por tanques israelíes. Los soldados israelíes deambulan por los diferentes departamentos del hospital Al Shifa impidiendo que la gente se desplace de un lugar a otro.
"Todo se ha acabado. Se cortó la electricidad y se acabó el agua, eso afecta el trabajo del equipo médico”, le dijo el doctor Abu Salmiya a la BBC.
“Todos morirán”
Naciones Unidas estima que 2.300 personas aún se encuentran en el complejo de Al Shifa, entre pacientes, personal médico y desplazados.
“Lo único que queremos ahora es agua, alimentos y medicinas para tratar a los heridos. Las fuerzas de ocupación ahora deambulan libremente dentro del complejo médico, donde fueron arrestados dos técnicos responsables del funcionamiento de la iluminación y el agua. Además, en algunos edificios se interroga al personal médico, mientras que a esos soldados no se les disparó ni una sola bala”, afirmó Abu Salmiya.
El ejército israelí dijo a la agencia AFP que proseguía el viernes sus operaciones en el hospital en busca de posibles escondites de Hamás, después de haber anunciado previamente que habían recuperado los restos de la soldado Noa Marciano, que se encontraba entre los rehenes secuestrados por Hamás, en "un edificio adyacente al hospital".
Se trata de la segunda rehén cuyo cadáver es hallado por el ejército israelí en Gaza en menos de 24 horas.
“Ahora estamos bajo control de la ocupación, entonces, ¿por qué las fuerzas de ocupación no nos trajeron combustible para operar el hospital, agua para preparar leche para los niños en las incubadoras y alimentos, por qué no abrieron corredores seguros para recibir a los heridos y enfermos? Si las cosas continúan así, todos los que están en el hospital morirán” agregó el doctor.
Y aunque Israel se ha comprometido a trasladar a los bebés prematuros y a los heridos a otras instalaciones médicas, el doctor Abu Salmiya dice que fue el personal del hospital el que exigió el traslado, y que “todo esto es mentira y engaño, ya que el ejército israelí no presentó ninguna iniciativa al respecto".
El director dice, además, que están comunicándose con todas las autoridades, incluidas las egipcias y las israelíes, para transportar bebés prematuros, pero “nos topamos con dilaciones”.
Finalmente y ante la pregunta de la BBC sobre el estado de algunos edificios del hospital que se presume han sido destruidos, el doctor dijo:
“Es cierto, pero no conozco los detalles. El área del hospital es grande y no podemos comunicarnos con todos los departamentos, e incluso las comunicaciones han sido cortadas por completo. Nos enteramos de explosiones que se produjeron en algunos edificios del hospital. La pared norte también quedó destruida, al igual que la tubería principal de agua”.