Operativo ambiental termina con la clausura de cuatro aserraderos en Limón
Durante tres días, funcionarios del Área de Conservación Amistad-Caribe realizaron estas diligencias con autoridades municipales, de Salud y el OIJ.
Un operativo ambiental de control en la industria maderera, realizado en Limón, terminó con la clausura de cuatro establecimientos.
Estos lugares incumplieron las medidas sanitarias por COVID-19 y no tenían los permisos de funcionamiento municipales ni del Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE). En algunos casos, estaban vencidos y nunca los renovaron.
Durante tres días, funcionarios del Área de Conservación Amistad-Caribe llevaron a cabo la diligencia policial junto con el Ministerio de Salud, la Municipalidad y el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de San José.
“Durante el operativo, se multó a los establecimientos por incumplir las normas de COVID-19, con 406.000 colones. Además, cuatro aserraderos se cerraron porque no tenían las guías correspondientes, ni pagos municipales y tampoco estaban inscritos ante el Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE) para su funcionamiento”, dijo Sergio Torres, funcionario del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC).
Debido a que los cuatro establecimientos madereros son reincidentes en este tipo de faltas, fueron clausurados en su totalidad y no podrán volver a funcionar.
Según las autoridades del SINAC, en lo que va del año se han decomisado más de 100 millones de colones en madera, obtenida ilegalmente. Las principales incautaciones se dieron en Santa Rosa, Bribri, Talamanca, Gandoca y Sixaola.
Hotel es investigado por sospechas de "envenenar" árboles y posible invasión a humedal
Un hotel ubicado en Punta Uva de Puerto Viejo, Limón, es investigado porque, al parecer, envenenó varios árboles que se encontraban a lo interno del lugar y por estar, en apariencia, dentro de una zona de humedal.
Un perro del OIJ, especialista en detectar hidrocarburos, dio positivo: las autoridades hallaron, aparentemente, varios árboles con veneno, que les habrían inyectado para que se murieran, utilizando un taladro.
Este caso es investigado por la Policía Judicial y la Fiscalía Ambiental de Pococí.
Las autoridades aseguran que muchos de estos operativos son posibles gracias a la colaboración de la ciudadanía, que denuncia los delitos ambientales.