POR Bárbara Marín | 15 de enero de 2023, 8:00 AM
En 2022, Costa Rica superó los parámetros con 656 homicidios en un año; situación que preocupa a las autoridades y ciudadanos, sobre todo porque encontramos un Ministerio de Seguridad Pública con recursos limitados para atender la lluvia de hechos violentos orquestados, en su mayoría, por grupos de narcotráfico y crimen organizado.
Así que todas las soluciones que no dependan del recurso financiero de esa cartera son medicina pura: en el horizonte es posible visibilizar a los gobiernos locales.
La creación de cantones por parte de la Asamblea Legislativa ha dado pie a que hoy en día contemos con 84; el último de ellos fue Puerto Jiménez, declarado así el año anterior. Pero de estos, solo 34 tienen Policía Municipal. ¿No sería beneficioso que cada cantón cuente con un cuerpo policial local capacitado y que brinde atención más inmediata?
Marcelo Solano, director de la Policía Municipal de San José, conversó con Teletica.com acerca de este tema.
Trasladar la responsabilidad de la seguridad, también, a los gobiernos locales, ¿podría ser una solución razonable?
Cuando el país deroga sus fuerzas militares, establece en la propia Constitución Política que el país tendrá las policías necesarias, así dice.
El país ha sido generoso financiando los cuerpos de rescate y de socorro, pero el país está en deuda con los cuerpos de seguridad. Entonces, sí, son proyectos necesarios que complementan los esfuerzos de la Fuerza Pública y que le generan al ciudadano una nueva autoridad a quien acudir para las necesidades de orden público.
Queremos que todas las policías del país tengan el mismo nivel, que todas las policías dentro de las comunidades tengas las mismas posibilidades de capacitación, preparación, logística, para que puedan responder a las necesidades de un cantón.
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Según los jerarcas de Seguridad y Justicia, los recortes presupuestarios impiden abordar adecuadamente esta problemática. Además, piden más apoyo del Poder Judicial.
En cada elección municipal, los candidatos de los cantones que aún no cuentan con Policía Municipal, pregonan soluciones en esta vía. ¿Podemos decir que la limitante ha sido meramente económica?
La parte económica no necesariamente ha sido el obstáculo, porque cantones con muy pocos recursos, que históricamente han sido colocados de la media hacia abajo, hoy tienen cuerpos de Policía Municipal, pequeños, con limitaciones, pero los tienen.
Mientras que otros cantones con recursos muy grandes no han dado el paso, ciertamente hay una decisión política en estos cantones.
Puntarenas es un ejemplo de eso, porque cuenta con un presupuesto de más de 9 mil millones de colones al año, dinero que supera por mucho al de otras municipalidades que sí tienen Policía Municipal.
Podríamos dar ejemplos concretos de eso, Liberia o Puntarenas, que reciben miles de turistas, que tienen problemas urbanos muy importantes, habitantes de calle, la ocupación de las vías públicas y que necesitan de un cuerpo policial municipal.
Las autoridades están conscientes, pero no terminan de ajustar la organización interna para que eso se pueda dar.
Vea por ejemplo Osa, en la lejanía del Sur, en donde la municipalidad viene trabajando un proyecto de Policía Municipal; o Corredores, en la frontera con Panamá. Personalmente, he estado en La Cruz, en donde hay interés de tener más presencia en el flujo de migrantes que se mueven hacia el Norte, o de pequeños cantones en zonas rurales que exploran la idea.
En el caso de Heredia, como provincia, a diferencia de dos cantones, prácticamente toda la provincia ya tiene Policía, y tenemos cantones en la Gran Área Metropolitana, como Aserrí, que está rodeado de cantones que tienen Policía Municipal, pero que por razones presupuestarias no han podido avanzar.
¿Por qué es necesario que todos los cantones cuenten con Policía Municipal?, ¿cuáles son los beneficios?
Las capacidades del país son muy limitadas porque, a diferencia de la región, no hay Fuerzas Armadas, no hay reserva, no hay Policía Federal, regionales, Guardia Nacional, como podrían estilar otras naciones, en los que se comparten territorios, pero también responsabilidades.
Si quitamos hoy a la Policía Municipal y suponemos que no existimos, la Fuerza Pública no tiene ningún socio estratégico en las tareas de orden público y seguridad ciudadana.
Las policías del Poder Ejecutivo son especializadas con funciones muy dirigidas, como la Policía de Tránsito, Policía de Control Fiscal, Policía Penitenciaria... Y realmente la Fuerza Pública se queda en un único nivel.
En el caso de San José, sería caótico pensar en la ciudad sin Policía Municipal...
Una buena parte de la problemática de San José es atendida, en exclusiva, por la Policía Municipal, y aunque los problemas como la venta ambulante, habitantes de calle, deterioro urbano, campamentos de migrantes, chatarreras, compra y ventas, vehículos abandonados, intervención de personas menores de edad, atención de pensiones, trata y tráfico de personas, centros de prostitución... Ese abordaje, de pronto, pasa desapercibido en las estadísticas, pero el trabajo es grande, constante y genera prevención.
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