Por Paulo Villalobos |27 de agosto de 2024, 18:00 PM

El presidente del Consejo Nacional Rectores (Conare), Gustavo Gutiérrez, y el ministro de Hacienda, Nogui Acosta, chocaron el martes en relación con los datos sobre la admisión de estudiantes de colegios privados.

Las declaraciones del rector de la Universidad de Costa Rica (UCR) se dieron durante la conferencia de prensa en la que se revelaron los detalles de una marcha que, este miércoles, tomará las calles de San José.

Esto luego de que, tan solo un día antes en una de sus intervenciones en el programa 7 Días, Acosta criticara el aumento del 4% que las casas de enseñanza pretenden para el Fondo Especial para la Educación Superior (FEES) y justificara la propuesta del Gobierno de la República de subirlo en solo 1% (equivalente a ¢5.700 millones).

A su vez, cuestionó los superávits de los centros educativos superiores por hasta ¢80.000 millones, su ejecución presupuestaria promedio de 87% y el hecho de que no tengan que retornar esos sobrantes a las arcas del Estado.

Sumó que en el escenario de escasez actual, el incremento debería ser disfrutado en distintas partidas, como infraestructura, inversión social y la educación primaria o secundaria.

"La oportunidad de los costarricenses de educarse es pequeña. Muy pocos estudiantes de los colegios públicos entran a las universidades. De los colegios privados, el 50% tiene acceso a las universidades. Yo creo que ahí debemos de tener esos subsidios universales y empezar a hacerlos mucho más focalizados", aseveró Acosta.

Al ser consultado al respecto por la prensa, Gutiérrez denunció la desinformación alrededor del uso que las universidades públicas dan a esos recursos. Afirmó que esa estrategia es orquestada por el Poder Ejecutivo.

Una muestra de lo anterior, puntualizó, es la divulgación de listas de salarios devengados en la Universidad de Costa Rica, en las que se incluyen personas fallecidas, jubiladas, entre otras.

"Los datos con respecto a lo que se dijo ayer en este espacio de 7 Días, sobre el ingreso mayoritario de estudiantes que vienen de colegios privados es totalmente falso. Eso lo hemos compartido, que es superior a un 75% que vienen de colegios públicos. También tenemos los porcentajes de aquellos que son las primeras personas que tienen acceso a educación superior.

"Pero por más que nosotros hablemos de esto, nunca va a ser aceptado por parte del Gobierno. Tenemos que ser más estratégicos que ellos. Aquí lo digo claramente, para ver cómo hacemos para que este mensaje basado en datos cale en el pueblo de Costa Rica", expuso el rector.

Como muestra de lo anterior, el rector aportó un detalle de la matrícula en la Universidad de Costa Rica durante el 2024, que apunta a que 7.560 de los 10.033 alumnos de nuevo ingreso —es decir, un 70%— provenía de un colegio público.

Las negociaciones entre el Gobierno y las universidades fracasaron el pasado 16 de agosto. En virtud de lo anterior, será la Asamblea Legislativa quien tenga la última palabra sobre el plan de gastos de las casas de enseñanza superior.

Tras las afirmaciones de Gutiérrez, este medio volvió a contactar a Acosta, quien insistió en que sus declaraciones están sustentadas en datos verificables.

Primero, en un análisis que realizamos en el Ministerio de Hacienda a partir de información de la Encuesta Nacional de Hogares 2023 del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), encontramos que, de los estudiantes que asisten a las universidades públicas, 15% viene del quintil de ingresos más bajo, mientras que 25% del quintil de ingresos más altos. En otras palabras, por cada estudiante de bajos recursos que aceptan las universidades públicas, al mismo tiempo ingresan 1,7 estudiantes de altos ingresos.

“Segundo, el Estado de la Educación 2023 señala textualmente ‘… En 2021 y 2022 el panorama cambió. El crecimiento en el acceso a educación terciaria fue significativo entre estudiantes de hogares de ingresos medios a altos… Pero no en los provenientes de menor nivel socioeconómico’. Adicionalmente, el mismo informe señala que ‘El aumento de la cobertura universitaria en los quintiles medios y altos y el estancamiento en los quintiles de menor ingreso tuvo como resultado un aumento en la desigualdad socioeconómica en el acceso’.

“(...) La evidencia es clara y contundente: la desigualdad en el acceso a las universidades públicas es innegable. Esto no solo perpetúa las brechas socioeconómicas, sino que la amplifica. Es urgente que las universidades públicas hagan un ejercicio de autocrítica para revertir esta tendencia y garantizar que la educación pública sea verdaderamente inclusiva y equitativa”, señaló el ministro.

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