“Chino” y su misión de endulzar a turistas nacionales y extranjeros
Eduardo Loaiza tenía solo 6 años cuando comenzó a trabajar entre trapiches, bueyes y jugo de caña.
Tenía solo 6 años cuando comenzó a trabajar entre trapiches, bueyes y jugo de caña. Lo que Eduardo Loaiza, conocido como “Chino” en Platanillo de Turrialba, no imaginaba es que lo que empezó por curiosidad se convertiría años después en la puerta a una experiencia única.
Hoy, Loaiza es un agricultor con una misión especial: mostrar a turistas nacionales y extranjeros todo el proceso de elaboración del dulce en el trapiche. Lleva más de 30 años desempeñando esta labor en la Hacienda Tayutic, donde ha acumulado una vasta experiencia.
“Aunque no soy muy dulcero, siempre hacer sobado o tapa de dulce es una experiencia que antoja a cualquiera, y eso es algo que los turistas disfrutan y valoran mucho”, comenta “Chino”.
Para él, su misión tiene un valor especial, ya que teme que algún día la labor en el trapiche, entre carretas y bueyes, se pierda.