Sueño de Navidad
Familia ya no tendrá que vivir en un pasillo gracias a su apoyo
Entre lágrimas, Guadalupe y sus tres hijos conocieron su nueva casa en medio de un inmenso agradecimiento al ver que su sueño de Navidad se había hecho realidad.
Don Juan Ramírez llegó a su vejez solito. No tiene hijos ni esposa. Tampoco tenía casa propia. Pero a sus 82 años nunca perdió la esperanza. Siempre soñó con todo su corazón y ese sueño se hizo realidad.
En el día en que su vida cambió, usaba un abrigo para protegerse del frío imperante en la zona. Estaba tan nervioso como emocionado, pues sabía que su mayor deseo estaba cerca a cumplirse: finalmente tendría su casa propia.
Es un apartamento, dotado de su propia sala y comedor. También cuenta con una acogedora cama y un baño seguro.
"Todo está lindo. No se puede decir nada... solo bonito, algo que solo veía en los sueños", dijo.
La cocina está completamente equipada, ya que Monge donó el menaje. También encontró alimentos y no deberá preocuparse por comprarlos durante un buen tiempo, pues Walmart le regaló un diario equivalente a ¢150.000 durante 13 meses.
Para el cumplimiento de este sueño fue muy importante el apoyo de Grupo Proing.
El pueblo de Costa Rica le demostró a don Juan que la edad no es un impedimento para que los sueños se hagan realidad.
Un año más, la ciudadanía dijo "presente" en el Sueño de Navidad.