Por Susana Peña Nassar |26 de octubre de 2024, 8:00 AM

“Estuve al borde de la muerte”: así describe María José Quesada, de 33 años, su reciente experiencia con el dengue.

Aunque es una persona sana y nunca supo de un contagio anterior, esta vecina de Ciudad Colón sufrió serias complicaciones por la enfermedad. Empezó con cansancio extremo, dolor de cuerpo y fiebre, “como una gripe”, pero esos síntomas empezaron a evolucionar de manera preocupante.​

“Siete días después de que aparecieron los síntomas, iba agravando. Todos los días era un poco más de dolor de cabeza, de cuerpo, y no podía levantarme de la cama. 

“La complicación fue en las plaquetas: empezaron a bajar hasta un último examen, que me hice en un laboratorio privado, donde salieron en 10 mil. Ahí fue cuando, inmediatamente, tuve que ir al hospital, porque ya la doctora me dijo: ‘Estamos graves’. Me dejaron internada”, contó la dueña de una boutique de plantas.

Video de la paciente en el hospital: 

El doctor Juan Carlos Venegas, epidemiólogo de la Clínica Dr. Clorito Picado de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), explicó que las plaquetas, normalmente, están entre 150 mil y 450 mil. Por debajo de 100 mil, ya es riesgoso, sobre si hay otros signos de alarma.

“Las plaquetas cumplen una función importante, porque son los taponcitos que tenemos en los vasos sanguíneos. Cada vez que yo me corto, se hace un ‘coagulito’, un granito, y las plaquetas son las que cumplen esa función. Normalmente, todas las arterias y venas que tenemos tienen cierta permeabilidad, tienen pequeños huequitos que ayudan al transporte de sustancias. En el caso de las plaquetas, cuando ese huequito se abre, la plaqueta lo va a tapar. Entonces, cuando empiezan a disminuir, aumenta la posibilidad que nosotros tengamos sangrados”, explicó el doctor.

Otras manifestaciones

Quesada aseguró que únicamente tuvo un pequeño sangrado vaginal; pero mostró fotos de cómo tenía las piernas durante su internamiento de cuatro días: totalmente rojas y con un brote de “ronchitas” blancas. Además, el virus le afectó la función del hígado y los riñones.

“Los pacientes pueden tener un brote, la piel se pone como rojita. La característica es que cuando yo le pongo la mano, en ese mismo lugar, desaparece. En algunos casos, la reacción inflamatoria es tan grande que la piel sí se va a poner completamente roja, como el caso de ella, y esa es una indicación de que hay una inflamación bastante importante en el paciente”, aclaró el médico.

Dengue
La paciente tuvo un brote en sus piernas. Foto: María José Quesada.

Un mes después, la joven enfrenta algunas consecuencias como picazón en el cuerpo; pero su percepción sobre el dengue cambió totalmente: no es solo “una gripecilla” o una “quiebrahuesos”, es una enfermedad que puede llevar a una persona al borde de la muerte. Por eso, ahora comparte su historia y pide a los demás aumentar las medidas para no caer en una situación similar.

“En el mismo hospital le dicen a uno: ‘Es un tema de ciencia o de Dios, lo que usted quiera creer’, y hay que esperar, nada más, es de lo más feo (…) 

“Por favor, cuídense, crean. Había personas internadas conmigo que vomitaban sangre, orinaban sangre; es algo muy grave, uno no se lo imagina, uno piensa que es una simple gripe: hasta el momento en que uno lo vive, uno entiende que el dengue es una enfermedad muy peligrosa”, concluyó la sobreviviente.

Si quiere conocer cuáles son otros signos de alarma de la enfermedad transmitida por el mosquito Aedes aegypti y qué pasa dentro del organismo cuando el virus ingresa, repase el episodio completo de ‘Su Salud’ en el video adjunto o en el siguiente enlace de YouTube.

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