POR Jessica Quesada | 8 de junio de 2015, 13:00 PM

Ríos secos, vacas muertas, potreros áridos, esta es la realidad de Santa Cruz, Guanacaste, actualmente.

Los informes de Senara, AyA y Minae advierten que los mantos acuíferos de Guanacaste se están secando, y que debe priorizarse el líquido vital para consumo humano, animal y agrícola.

En medio de este panorama, la noche del martes anterior, el Consejo Municipal de Santa Cruz acordó seguir autorizando la construcción de nuevos edificios, especialmente en playa Tamarindo.

Los inversionistas generan cerca del 70% de los empleos en la zona, y señalan que no es necesaria la prohibición, pues de previo deben hacerse estudios de demanda de agua, para determinar si efectivamente no hay líquido. Pero piden más ayuda del Gobierno.

Telenoticias viajó a la zona para constatar el paso de la sequía. El resultado: el río Cañas, uno de los más caudalosos, prácticamente se secó; la suerte del rio Diria es la misma, y los potreros lucen teñidos de café.

La regidora, Rosa Vallejos, insiste en que responsablemente el municipio debería acatar la recomendación de las autoridades.