Proyecto de la UCR transforma restos de la cosecha de café en una valiosa fuente de energía

Un proyecto de la Universidad de Costa Rica, liderado por el ingeniero en
Juan Pablo Rojas Sossa, es capaz de transformar hasta una tonelada de residuos de pulpa de café y aguas mieles en biogás, una fuente de energía capaz de convertirse en energía eléctrica y térmica.

La transformación ocurre cuando en un entorno anaeróbico, es decir, sin oxígeno, diversas bacterias degradan la materia orgánica, lo que libera un gas compuesto principalmente por metano y dióxido de carbono, ese el biogás. 

El proyecto lo desarrolla la escuela de Ingeniería de Biosistemas en conjunto con Coopetarrazú, la cooperativa cafetalera más grande del país y por ende la que más residuos de café produce. 

​"Tenemos 10 años de trabajar en el proyecto. Ha sido un reto significativo porque necesitamos bacterias específicas que se puedan consumir cafeina, azúcares y otros compuestos químicos. 

En los laboratorios de la universidad hemos tenido que adaptar comunidades microbianas involucradas en el proceso para que consuman las sustancias. El éxito del proyecto es que combinamos biología e ingeniería", explica Rojas. 

Producir el grano de oro es todo un reto para el medio ambiente, porque según estima la UCR, para obtener 2,3 kilos de café molido se necesitan 100 kilos de café en fruta. Es decir, habrá 97.7 kilos de residuos.

De no aprovecharse ni procesar de manera adecuada esos sobrantes, al descomponerse, además de un muy mal olor, emanarán Gases de Efecto Invernadero (GEI), responsables del cambio climático.

Un proyecto de Naciones Unidas estimó en 2018 que la producción de café era la responsable del 9% del total de emisiones de GEI de nuestro país.

​"Actualmente el proyecto está en la etapa 7 de 9. Tenemos un prototipo que opera en condiciones reales y puede procesar una tonaleda diaria de residuos para producir 54 metros cúbicos de biogás. La siguiente etapa es que pueda procesar hasta 100 toneladas diarias", proyecta el ingeniero. 

Durante la última cosecha de café, Coopetarrazú aprovechó el biogás para alimentar algunos de los radiadores y hornos para el secado del café.

"Por la composición de la matriz energética del país, en la universidad creemos que el biogás se puede llegar a usar en el transporte. Y cuando hablamos de transporte hablamos de carga, transporte público (...) porque podemos producir combustibles y biocombustibles en nuestro país en zonas rurales  ​a un precio muy competitivo, con márgenes de ganancia de hasta 60%" explica el especialista.

Rojas explica que, además del biogás, es posible obtener nutrientes como fósforo y nitrógeno que sirven de abono, evitando así el uso de fertilizantes. 

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