Nace Una Estrella
'Nace una Estrella': Mariser Picado, una niña con corazón de oro
La vecina de Cartago, a pesar de su corta edad, ha enfrentado desafíos significativos en su vida.
Jeremy Solís Amador, de 13 años, se convirtió en el ganador de la última gala de Nace una Estrella (NUE).
En su presentación, el oriundo de San Carlos recibió elogios del jurado al obtener dos puntajes perfectos (10) con su interpretación de Cómo mirarte. Los jueces destacaron que esta fue su mejor actuación de la temporada, hasta ahora, otorgándole un total de 38 puntos.
Jeremy, a pesar de su corta edad, ha tenido que enfrentar grandes retos en la búsqueda de ser un artista. Uno de los desafíos más grandes fue su mudanza lejos de su hogar, en San Carlos, Alajuela.
El joven cantante compartió su experiencia en una entrevista con Teletica.com, expresando lo difícil que ha sido separarse de su familia y, en particular, de sus queridas mascotas, un pastor alemán y un belga malinois.
"Ha sido bastante duro, primero alejarme de mi familia y de mis animalitos, que los quiero mucho. Si fue bastante difícil, me hacen mucha falta", confesó el pequeño cantante.
A pesar de la distancia, continúa con su educación y sus responsabilidades escolares. "Con el cole, pido la materia a mis compañeros, ellos me la mandan por fotos y yo la copio y se la mando a los profes", compartió el joven artista.
Su padre, Marco Antonio Solís Arguedas, también hizo un sacrificio significativo para apoyar a su hijo.
"Yo hablé en la empresa en la que trabajo y me dieron un permiso sin goce de salario por el tiempo que él dure en el programa, entonces yo me vine con él. Mi esposa quería venirse, pero tenemos otro chiquito de 7 años y es muy pegado con ella, y si yo me quedaba tenía que ir al trabajo y descuidar al chiquito", explicó Marco Antonio.
Esta separación ha sido un desafío emocional para la familia, ya que es la primera vez que se separan por tanto tiempo en sus 22 años de matrimonio.
Jeremy Solís no es un novato en la música. A pesar de que audicionó sin éxito en 2021, decidió darle una segunda oportunidad al programa y, esta vez, logró ingresar al formato.
"Ahora estoy más grande y consciente de que estoy viviendo algo que no voy a volver a vivir, pues la verdad siento que ahora lo estoy disfrutando más de lo que lo hubiera hecho en el 2021", agregó el joven cantante.
La pasión de Jeremy por la música se gestó desde temprana edad, como lo relató su padre.
"Jeremy empezó agarrando un mecate como si fuera un micrófono y tarareaba las canciones, luego agarró una manguera y luego agarró el micrófono. Para los seis años, participó en un concurso en el kínder y le fue muy bien, y luego siguió en todos los festivales de la escuela".
Además de su amor por la música, Jeremy disfruta jugando voleibol, pasando tiempo con su familia, divirtiéndose con sus mascotas, compartiendo momentos con amigos y relajándose con baladas y reguetón.