Internacional
Hermanas ticas pasaron 14 horas de horror en kibutz donde irrumpió Hamás
“Cada segundo que pasaba era una incertidumbre de si iban a entrar terroristas a mi casa para secuestrarme o asesinarme”, relató a este medio una de las hermanas.
Es el sexto de día de enfrentamientos entre Israel y el grupo Hamás, y decenas de familias israelíes siguen sin tener información sobre el paradero de sus familiares.
Hasta el momento, los terroristas han lanzado más de 5.000 misiles sobre el territorio israelí, mientras que este país, en defensa, ha descargado 4.000 toneladas de explosivos en la franja de Gaza.
Además, hay al menos 97 rehenes confirmados, a merced de Hamás.
Hijos desaparecidos
Itzik Horn no tiene contacto con sus dos hijos, Iair y Eitan, desde el sábado 7 de octubre, primer día de los ataques terroristas.
Iair vive muy cerca de Gaza, en el kibutz de Nir Oz, y su hermano Eitan había ido a pasar el fin de semana junto a él.
A las 6:40, 10 minutos después de que sonaran las alarmas, Horn se comunicó por mensaje con Iair, para saber si habían logrado llegar al refugio: “Jajaja, siempre te olvidás que Nir Oz está tan cerca de la franja que los cohetes nos pasan por encima”, le respondió el hijo.
Un tercer hermano logró comunicarse con Iair a las 8:30 a. m. de ese sábado, quien le confirmó que había llegado al refugio. Sin embargo, esa fue la última vez que la familia Horn tuvo contacto.
“Cuando empezaron las primeras imágenes subidas y mostradas por la jurisdicción israelí, yo miraba y decía: 'Pobre gente, enterarse por un video que subió el Hamás que sus familiares son secuestrados a Gaza'. Después del domingo a las 10 a. m., yo ya miraba los videos con desesperación a ver si encuentro a mis hijos y no los vi”, dijo el padre.
Ahora, Horn señala que “lo único” que pide es que alguien le diga dónde están sus hijos.
Padres secuestrados
Yulie Ben Ami despertó el sábado con los ruidos de las alarmas y estallidos de las bombas. A las 9:30 a. m. conversó con su mamá por mensaje y confirmaron entre ellas que estaban en sus respectivos refugios.
“De repente, mi mamá me dice que alrededor de la casa hay terroristas que están gritando e intentan entrar a la casa. Me dijo que no sabe qué hacer, que tiene miedo, que están disparando encima del cuarto. Como a las 10:05 a. m., mi papá nos escribió a mí y a mis hermanas, que están (los terroristas) adentro del refugio y que lo atraparon a él y a mi mamá”, contó Ben Ami.
Media hora después de eso, a las hermanas les llegó una foto que circuló por Telegram, donde su papá estaba rodeado de terroristas: “Desde entonces no escuchamos nada ni de mi mamá ni de mi papá. Estamos pensando que están dentro de Gaza secuestrados”, agregó la joven de 27 años.
“Los quiero mucho”, lo último que un joven de 19 años dijo a su padre
Ron Sherman es un joven soldado, de 19 años, quien trabaja en el límite con Gaza, verificando el paso de mercaderías en la frontera.
El sábado a las 6:30 a. m. estaba durmiendo después de una guardia, cuando se despertó con un fuerte bombardeo, según cuenta su padre, Alex Sherman.
“Nos llama por teléfono y nos empieza a contar en directo lo que pasaba en la base. Cuando pasa el tiempo nos cuenta que se hace el bombardeo más y más potente, empieza a escuchar también tiroteos y gritos en árabe”, narró Alex.
Tras esto, Ron desconectó la llamada y escribió por mensaje a sus padres, diciéndoles que no podía hablar porque los terroristas estaban muy cerca: “Nos dice: 'Es el final, están al lado de la puerta. Los quiero mucho. Ciao'. Y se desconectó del teléfono”, agregó el padre.
Unas horas después, los padres de Ron lo identificaron en un video en redes sociales, donde se ve el ataque a la base. En el material, se ve al joven y otros dos soldados maltratados, pero vivos. Eso es lo último que saben sobre el soldado, que ni siquiera es de combate y, además, padece de asma.