Salas sobre regreso a clases: "No es viable hablar de esto"
El jerarca aseguró que no sería lógico reanudar el curso lectivo cuando el país registra un aumento de casos de COVID-19 y más cantones en alerta naranja.
El aumento de casos de COVID-19 que experimenta el país desde hace algunas semanas, podría retrasar aún más el regreso a clases.
Aunque no hay una fecha definida por el Ministerio de Salud y el Ministerio de Educación Pública (MEP), el mes de agosto se estableció como un "horizonte" para la reanudación del curso lectivo.
Ese escenario podría cambiar debido a la segunda ola pandémica que golpea a Costa Rica.
“Es lógico pensar que en un escenario donde estamos más bien teniendo más cantones en alerta naranja y un escenario donde estamos cerrando muchas de las actividades, no permitiendo que funcionen después de cierta hora, la verdad no es lógico, no sería congruente pensar en una reapertura de clases", dijo el ministro de Salud, Daniel Salas.
"Esto es un análisis constante, estamos todos los días viendo los datos, viendo las posibilidades; pero definitivamente, en medio de una segunda ola, con esta cantidad de casos que estamos teniendo y el impacto en los servicios de salud, pues no es justamente viable hablar de esto", agregó el jerarca en conferencia de prensa.
Después de vacaciones de 15 días (13 de julio), el MEP iniciará un proceso de capacitación para docentes y seguirá reforzando el programa “Aprendo en Casa”.
La semana anterior, Teletica.com conversó con Steven González, viceministro administrativo del MEP sobre el plan "Regresar".
“Algo importante es que la estrategia que estamos planeando es para determinar cómo sería ese regreso, no cuándo, porque el cuándo lo va a determinar el Ministerio de Salud, según la evolución de la pandemia. Nos estamos preparando para estar listos para ese momento”, dijo en esa oportunidad.
Las autoridades han tomado algunas decisiones: las zonas en alerta naranja no retomarán las clases presenciales, los estudiantes de preescolar y educación especial no volverán a las aulas durante la primera etapa y solo se tomarían en cuenta centros educativos con infraestructura adecuada.
Además, los grupos de estudiantes serían de máximo 10 estudiantes para garantizar el distanciamiento físico dentro de los salones de clase.