Reseña sin 'spoilers' de 'Dogman'
“Cuando un hombre tiene problemas, Dios le envía un perro”, Alphonse de Lamartine.
Por @LauSinSpoilers | Laureen Fernández.
Dogman es una historia increíble sobre un pequeño, quien, golpeado por la vida, encuentra su salvación en el amor por sus perros. Luc Besson, su director, comentó que la inspiración para esta película provino, en parte, de un artículo que leyó sobre una familia francesa que metió a su propio hijo en una jaula cuando tenía cinco años.
De ahí surgió el interrogante de cómo algo así afecta mentalmente a una persona. ¿Cómo se sobrevive y qué se hace con el sufrimiento? Dogman no sería la película que es sin Caleb Landry Jones. El complejo personaje requería una persona que pudiera encarnar los desafíos, la tristeza, el deseo, la fortaleza y la complejidad. Su enorme capacidad actoral es la clave para que esta cinta sea atrapante a más no poder.
Pero no se puede dejar de lado el desafío de la enorme cantidad de perros en el set, por lo que Sofiane Tarefet, especialista en bite training, técnica que enseña a los canes a controlar la fuerza de sus mandíbulas, explicó lo siguiente: “Tuvimos que preparar a los perros para que no se sobresaltaran si el actor empezaba a hablar alto, cantar o gesticular”. Esto dio como resultado lo que parece una relación de años entre el protagonista y los animales.
El jefe de especialistas en escenas de riesgo, Alain Figlarz, también armó coreografías para las ‘sueltas de perros’, en las que los animales son dirigidos hacia un personaje para atacarlo o se les describe un recorrido desde el punto A al punto B. “Yo mismo también estuve ahí para que me mordieran en lugar de los actores, y hay una escena en particular en la que estoy suspendido por un cable y un perro viene a morderme en la garganta”, señaló.
Para entender más sobre la trama de esta profunda historia, puedes ver el tráiler: