Por Susana Peña Nassar |30 de abril de 2015, 16:43 PM

La venta ilegal de lapas rojas en el país se convierte un negocio que mueve miles de dólares, y que pone más en riesgo una especie en peligro de extinción.

Los colores llamativos y su belleza identifican a esta especie que habita, principalmente, en el pacífico del país.

Aunque en los últimos años se logró aumentar la población de lapas rojas, el comercio ilegal las amenaza nuevamente.

En Costa Rica estos ejemplares tienen precio y son muy buscados.

Esta semana funcionarios del Minae decomisaron cuatro lapas adultas y dos pichones dentro de cajas en una propiedad en Guápiles. Ahora se investiga si las aves iban a ser vendidas.

Esto es una práctica común, y se refleja en la gran cantidad de lapas rojas que eran mascotas e ingresan a los refugios o centros de rescate del país.

Debido a que la mayoría de animales decomisados tienen las alas cortadas, no pueden ser liberadas y tienen que permanecer en cautiverio.