Viaje al pasado de Guanacaste dentro del Ecomuseo
La idea de crear un espacio donde se pudiera conservar y promover la cultura chorotega surgió en 1992, gracias a la iniciativa de los vecinos de San Vicente.
Ubicado en San Vicente de Nicoya, Guanacaste, este tesoro cultural resguarda y exhibe la herencia ancestral de los indígenas chorotega.
El Ecomuseo de San Vicente, que nació hace 32 años como un sueño de la comunidad, es hoy una realidad viva que no solo preserva el arte y las costumbres de este pueblo, sino que también educa e inspira a todos los que lo visitan.
José Félix Padilla, vocero del Ecomuseo, es una figura clave en la difusión de la riqueza cultural de San Vicente y Guaitil, dos localidades que hoy son consideradas la cuna del arte chorotega (repase la nota completa en el video adjunto).
Bajo su liderazgo y el de un equipo comprometido, el museo se ha convertido en un punto de referencia para los amantes de la historia y las tradiciones indígenas de Costa Rica.
Un sueño hecho realidad
La idea de crear un espacio donde se pudiera conservar y promover la cultura chorotega surgió en 1992, gracias a la iniciativa de los vecinos de San Vicente. Aunque el sueño comenzó a gestarse hace más de tres décadas, fue en el 2003 cuando se dio inicio a la construcción del Ecomuseo, que finalmente abrió sus puertas al público en 2007.
Este proyecto fue impulsado por el deseo de la comunidad de honrar y preservar su herencia cultural, un legado que ha sido transmitido a lo largo de generaciones. El Ecomuseo no solo es un espacio de exhibición, sino también un centro de aprendizaje, donde tanto locales como visitantes pueden profundizar en las tradiciones, costumbres y arte de los chorotegas.
El arte chorotega: un legado milenario
En el Ecomuseo de San Vicente, uno de los principales atractivos son las charlas sobre la cerámica chorotega, una tradición ancestral que ha perdurado en la región. Los artesanos de San Vicente y Guaitil de Santa Cruz, reconocidos como los guardianes de este arte, utilizan técnicas milenarias para crear piezas de cerámica que reflejan la cosmovisión, la espiritualidad y el entorno natural de los chorotegas.
Estas charlas, impartidas por expertos locales, permiten a los visitantes conocer de cerca el proceso de elaboración de la cerámica, desde la recolección de la arcilla hasta la decoración de las piezas con motivos geométricos y simbólicos. Además, el Ecomuseo ofrece una mirada al pasado de la comunidad, rescatando las historias y vivencias de los pueblos originarios que habitaron estas tierras mucho antes de la llegada de los colonizadores.
El Ecomuseo de San Vicente cuenta con un equipo de siete personas, todas dedicadas a mantener vivo el espíritu del lugar y a ofrecer una experiencia enriquecedora a los visitantes.
Si desea conocer más sobre el Ecomuseo y planificar una visita, puede contactarlos al teléfono 6410-6928 o visitar su página web en ecomuseosanvicente.org. Sumérjase en la historia de la cultura chorotega y descubra por qué este rincón de Guanacaste es tan especial.
