La Fortuna tuvo su desarrollo gracias a las erupciones del volcán

Para la década de los 60´s, La Fortuna era un pueblo rico por sus tierras, la fertilidad del lugar era envidia de todos los habitantes.

Pero, para 1968 ocurrió la catástrofe, la que nadie se imaginaba ni esperaba. El coloso despertó y mató a gran cantidad de personas, las cosechas se perdieron y también la gente se comenzó a ir, pues la incertidumbre de lo que sucedería con el pasar de los días se apoderó de todos. 

​ Pero comenzó a presentarse un fenómeno particular, poco a poco llegaron turistas con mochilas con el deseo de ver un volcán activo con erupciones en la noche.

Llegaban por decenas y ya no había donde hospedarse, por lo que los vecinos comenzaron a hacer habitaciones y hoteles, hasta que en el 2000 ocurrió un boom turístico y emergieron los hoteles premium favorecidos por el agua termal. 

Así es como La Fortuna evolucionó y hoy es un destino turístico que abraza a miles de personas de todo el mundo que ahora vienen no solo por el volcán y agua termal, sino por un destino de paz, de meditación, de verdor, de aventura y de lujo.