Ejercite su cerebro contra el Alzheimer y otras demencias
Conozca los beneficios de las adivinanzas, sopas de letras, crucigramas y otras prácticas para ejercitar la memoria.
Redacción: Miguel Fallas.
Se calcula que en el país, cerca del 8% de la población adulta mayor vive con Alzheimer u otro tipo de demencia. Esta condición se puede minimizar o retardar, dependiendo de la causa, poniendo en práctica técnicas para mejorar el funcionamiento del cerebro.
De la mano de la psicogerontóloga Jenny Mora hicimos adivinanzas, sopas de letras, crucigramas y más prácticas para ejercitar la memoria (vea la entrevista completa en el video adjunto).
Ante los síntomas de pérdida de memoria, dificultad para encontrar palabras, cambios de comportamiento, desorientación y problemas con tareas cotidianas. Los ejercicios mentales ayudan al cerebro a mitigar este proceso.
Las adivinanzas estimulan la creatividad, el pensamiento lateral, la memoria y la capacidad de resolver problemas. Son ejercicios ideales para empezar, ya que permiten enfocarse en la lógica y la asociación de ideas.
Las sopas de letras obligan al cerebro a seguir un patrón no lineal, lo que aumenta la dificultad y ejercita diferentes conexiones neuronales. Por otro lado, el pensamiento profundo es la capacidad de analizar información compleja, establecer relaciones abstractas y generar ideas originales.
Entrenar el olfato puede mejorar la memoria, la atención y reducir el riesgo de demencia. Identificar diferentes olores, crear memorias asociadas a ellos y realizar ejercicios de discriminación olfativa ayuda a que el cerebro asocie pensamientos a olores y sensaciones.
Los diccionarios de sinónimos amplían el vocabulario, mejoran la fluidez verbal y fortalecen las conexiones neuronales relacionadas con el lenguaje. Algo tan sencillo como elegir una palabra al día, buscar sinónimos y utilizarlos en oraciones puede marcar una gran diferencia.
Los tradicionales crucigramas que encontramos en los periódicos ayudan a mejorar la memoria, el vocabulario, la atención y la concentración, ya que, pueden ayudar a mantener la mente activa.
Si bien muchos de estos ejercicios son medidas mitigadoras, sus prácticas frecuentes pueden ayudar de manera significativa a reducir el proceso de deterioro o el desarrollo de una demencia. Además de los ejercicios cognitivos, la actividad física, una dieta saludable y el sueño adecuado también son fundamentales.
Para más información, puede contactar a la psicogerontóloga, Jenny Mora, al número de teléfono 2288-0209 o al WhatsApp 6366-7441. También al correo [email protected].