Alejandro Cole: La historia detrás del reconocido tatuador y empresario tico
El artista, quien tiene más de 30 años de experiencia, posee una franquicia de tatuajes y perforación con siete locales en el país.
Alejandro Cole Morales es uno de los pioneros de los tatuajes en Costa Rica. Gracias a su resiliencia y amplia trayectoria, hoy tiene una de las franquicias más importantes de arte corporal en Costa Rica, Stattoos.
En una entrevista con Teletica.com, el artista de 51 años recordó sus inicios en el arte de tatuar y cómo su jefe, cuando se desarrollaba como ingeniero industrial, lo impulsó a luchar por sus sueños.
"Creo que la época en la que yo empecé fue muy importante porque había mucha influencia musical, muchas bandas, mucho rock, tal vez de ahí empezó mi inspiración. El primer estudio lo abrí en Los Yoses, en 1996, como parte de ese sueño que tenía por fomentar el arte. Luego vino la apertura de otros estudios.
"Cuando estaba joven, entré a estudiar Ingeniería Industrial, una vez estaba hablando con mi jefe y me dijo que yo tenía mucho talento, que qué hacía ahí. El lunes siguiente renuncié y fue cuando empezó mi historia como 'tattoo artist'. En ese momento, las personas en el país no sabían mucho de tatuajes, pocas personas se tatuaban y cuando te buscaban, siempre revisaban que todo estuviera esterilizado, que las agujas fueran nuevas, eso me ponía tranquilo porque mis clientes se informaban. Siempre he disfrutado tatuar", dijo.
Su enfoque está en el tatuaje tradicional, tanto japonés como americano. Más del 30% de los artistas del país han trabajado con Cole, lo que refleja su impacto significativo en la cultura del tatuaje en Costa Rica.
"Conforme crece la demanda, las personas empiezan a enfocarse en esto. Como tatuarse se volvió una moda, los tatuadores aumentaron. Mi recomendación siempre es que se tatúe con alguien que sepa, aunque sean personas jóvenes, que apenas inician. No está bien ir donde un tatuador que aprendió viendo videos de YouTube y nunca ha llevado un curso. Es responsabilidad también. Yo he trabajado con muchos tatuadores, es bonito saber que fui de las personas que empezó con esto en Costa Rica y de las cosas que me pone más triste es ver a las personas con tatuajes mal hechos", acotó.
Cole terminó dando un consejo a ese Alejandro de 20 años y a todos los jóvenes que quieran incursionar en el arte corporal.
"Ese consejo de oro, que no creo que sea de oro (risas), es intentarlo. Si le gustaría tatuar, inténtelo, eso no significa que sea bueno, pero puede que sí lo sea. Es mejor eso a no quedarse con las ganas de hacerlo y creo que aplica para todas las profesiones. Yo, al final, no terminé la Ingeniería, lo mío es tatuar y hoy agradezco haber tomado esa decisión. Ahora no tatúo tanto, mi idea es que los tatuadores que trabajan conmigo se den a conocer. Uno nunca deja de hacer lo que le gusta; por eso, cuando me buscan a mí para tatuar, me siento honrado", finalizó.
El empresario ahora también forma parte de Pura Tinta Fest, evento masivo que reúne a los mejores expositores nacionales e internacionales y que ha fortalecido a la comunidad artística en el país.