Argentina perdió más de 33 mil empleados públicos con Javier Milei

Más de 33.000 personas que eran empleadas por el Estado han quedado sin trabajo en Argentina desde que Javier Milei asumió la Presidencia en diciembre de 2023, la gran mayoría por despidos, pero también por la no renovación de contratos, renuncias y jubilaciones, informaron este jueves fuentes oficiales.

El ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, justificó estas decisiones en que "la única manera sustentable de bajar la carga de impuestos es bajando el gasto público", según dijo en su perfil de X (antes Twitter).

Sturzenegger publicó en las redes sociales un gráfico con el número de puestos de trabajo perdidos en el sector estatal entre enero y septiembre de 2024, cifras que alcanzan a un total de 33.291 personas. Unas 20.026, la gran mayoría, pertenecían a la administración pública, 11.014 a empresas estatales y otras 2.251 a la Policía y el Ejército.

La oleada de desvinculación laboral más dramática tuvo lugar a principios de la gestión de Milei, cuando en enero de 2024 se perdieron 7.607 empleos. En abril, otras 7.000 personas se quedaron desempleadas a causa de la no renovación de contratos, retiros voluntarios y jubilaciones, puestos que no han sido restituidos.

Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), hasta agosto de 2024, se eliminaron unos 28.500 empleos estatales, es decir dependientes de la estructura de la República y no de las provincias y municipios, lo que supone una reducción de casi el 10 % de la plantilla, que en ese mes era de 309.849 personas.

Días antes, Milei hizo una advertencia a alrededor de 10.000 funcionarios del Estado para que inicien sus trámites de jubilación y anunció que 40.000 personas con contratos temporales deberán someterse a un examen de idoneidad para poder continuar en sus puestos. Estas decisiones han llevado a la convocatoria de huelgas y protestas en todo el país contra los recortes y en demanda de mejoras salariales, impulsadas por los principales sindicatos de asalariados públicos.

Fuentes del Ministerio de Desregulación declararon a la agencia EFE que el Gobierno seguirá recortando el gasto público y las plantillas para "respetar el mandato de la sociedad expresado en las urnas el año pasado".

Las personas despedidas o cuyos contratos no han sido renovados se sumarán a las que van a generar los planes de privatización de empresas públicas, donde el Gobierno pretende eliminar cerca de 100.000 puestos en algo más de 40 compañías, según el propio Milei.