30 de agosto de 2024, 16:33 PM

Periodista: Berny Jiménez.

En una gasolinera, donde usted paga esos 5, 10 o más de 15 mil colones diarios, termina gran parte del combustible que llega al país; la otra parte va a más de 50 tomas y 23 túneles que, solo este año, intervino la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) por sustracción ilegal. Pero, al final, ¿quién paga esas pérdidas?

Hasta la fecha, se decomisaron 2,9 millones de litros de gasolina robada; sin embargo, más de un millón de litros no se lograron recuperar.

Con una factura que pagamos todos los consumidores, Recope compra el combustible en el exterior. Solo en el último mes, el país destinó 322 mil millones de colones (lo que cuestan dos hospitales como el de Cartago) para importar 446 millones de litros de Diésel, en su mayoría de los Estados Unidos.

Esa factura se presenta mensualmente a Aresep para que esta apruebe las nuevas tarifas sobre las compras totales, sin importar si el combustible llega a usted o si se queda en algún túnel o toma clandestina.

Este año se reportó una pérdida de un millón y medio de litros de combustible que alcanzarían para cubrir el consumo mensual de 14 mil vehículos, valorados en 11 mil millones de colones.

¿Qué sucede con las pérdidas? “Hasta la fecha, Aresep no ha reconocido en la tarifa las pérdidas por robo de combustibles. Dicho producto robado se registra y revela en el estado de resultados, específicamente en la cuenta de otros gastos y, por lo tanto, se consideran pérdidas operativas”, indicó el departamento de prensa de Recope ante la consulta de Calle 7 Informativo.

Desde que entró a regir una ley para sancionar el robo de combustible con hasta 15 años de prisión, la institución presentó 773 denuncias ante el Ministerio Público, pero solo 33 personas han sido sentenciadas.

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