POR Teletica.com Redacción | 15 de marzo de 2024, 9:50 AM

Rogelio Benavides / benapresa@gmail.com.

Cumpleañeros

Hoy quiero empezar con un dato curioso. Ignoro a qué obedece que el 18 de marzo cumpla años tanta gente conocida. De acuerdo con mis apuntes, el 18 de marzo cumplen años: el presentador y productor Tigre Tony, el empresario Alfredo Sasso, el experto taurino y presentador Michael Bleak, la zarina de la moda Amanda Moncada, la modelo Oriana Chacón, la modelo Carolina Ureña, la ex Miss Costa Rica Merilyn Villalta, el bailarín Neto Rangel, mi amiga española María José Chueca (mamá de Manuel Peña), el destacado abogado Raymundo Macís y la modelo Laura Méndez. Otros cumpleañeros de esta semana son la reina de belleza Holly Peraza (cumple el 16 de marzo), el licenciado y fisioterapeuta Jorge Enrique Tenorio Madrigal (16), la embajadora Marcia Montes Cantillo (17), el dj Doctor Leo (17), la escritora Maybelline Reyes (17), el músico Leonel Ortega (19), la periodista Nayuribe Vargas (19), la presentadora e influencer Keyla Sánchez (20), la periodista, mercadóloga y top model Nella Chase (20) y Juan José S. Chaves (21). Felicidades.

Amanda, digna de ser amada

Amanda Moncada Mora, zarina indiscutible de la moda en Costa Rica, cumple años el 18 de marzo, Día de San Cirilo. Amanda es una mujer querida y ampliamente conocida. Es una luchadora, una sobreviviente, no le arruga la cara a nada ni a nadie. Primero se metió en los enredos de la moda y terminó bailando, casi jadeando, en el famoso espacio Dancing With The Stars, de Canal 7, donde hizo un digno papel. Amanda es generosa, buena, amorosa, chispa, de pronto un tiro al aire, pero especialmente una gran persona. De pronto es un poco acelerada (intensa como dicen ahora). Toda esa conducta anterior tiene su explicación. Amanda viene del latín “amandus” que significa amable, digna de ser amada por todos. 

Dice el oráculo que las personas que llevan el nombre de Amanda pueden ser muy complejas y bajo una apariencia tranquila, sosegada y autoritaria se esconde una mujer nerviosa, cerebral, curiosa, crítica, analítica y algo escéptica. Aunque desea siempre ver, conocer, viajar y moverse, en su vida diaria debe esforzarse y trabajar pacientemente.

Sentimentalmente, vivirá las mismas contradicciones internas, es decir, que aun cuando siente la atracción de cambios y aventuras, su necesidad de estabilidad les impide lanzarse a ellas. San Amando fue un ermitaño convertido en obispo que murió en 679 tras una vida piadosa en la abadía de Enone, donde hoy existe el pueblo de Saint-Amand-les-Eaux. Tras él, una docena de Santos honraron dicho nombre. Santa Amandina era una franciscana misionera en China, donde fue asesinada en 1900. En cuanto a Moncada, es un apellido catalán, descendiente de Hércules, antiguo rey de Alemania, pero, mejor, no sigamos porque se nos puede complicar la familia. ¡Feliz cumpleaños Amanda¡

Amanda Moncada.

Raymundo Macís, un ciudadano ejemplar

El próximo lunes 18 de marzo, cumpleaños, el abogado y productor Raymundo Macís, quien hace unos cuatro años nos sorprendió con el valioso espacio televisivo “Dicen que el alma”, porque tenía la esencia del alma buena de este compatriota, preocupado siempre por resaltar los valores que nos han distinguido como país y como sociedad. 

Raymundo promueve actitudes como la honestidad, la solidaridad, la tolerancia y, destaca especialmente, la educación, indispensables para salir adelante. Ese sano sentimiento que lo llevó a producir “Dicen que el alma”, difundido en Canal 7, es el norte de este buen hombre que sabe que lo más importante que podemos practicar, dar y compartir es amor, sencillamente amor. De acuerdo con Macís, “cuando dejamos este mundo, únicamente nos llevamos el alma para buscar otros horizontes místicos, una nueva oportunidad de existencia. Dicen que el alma es la esencia de la gente, dicen que el alma es la vida”. Para él, cada ser humano tiene algo bueno que aportar, que lo hace ser único e irrepetible. 

Lo he visto tratar con el mismo respeto a todas las personas, desde el joven que le cuida el carro, hasta un destacado empresario o político. Aunque él no lo diga, sé que tiene como amigos a artistas internacionales y a gente realmente influyente y destacada como la gran Carolina Herrera. 

Carolina Herrera y Raymundo Macís.

Dejando de lado los éxitos profesionales y títulos académicos, diré que Raymundo es inteligente, noble y leal. Pero también posee un carácter firme, fiel a sus convicciones y así como es amable, sé lo estricto y directo que puede ser cuando algo no le gusta. Sabe querer incondicionalmente, pero cuando es traicionado es capaz de cortar todo lazo de forma tajante y sin vuelta atrás. Le gusta el lujo, pero no se desvive por tenerlo, quizás por eso la vida ha sido tan generosa con él. 

Es honesto porque, como una vez lo mencionó, “lo valioso que nos podemos regalar es la propia fidelidad, que nos da la confianza y transparencia necesarias para obtener lo que necesitamos”. Pero encima de todo, es un gran amigo, confidente. Lo quiero y sé que él también me quiere. Mi apreciado Raymundo: Cuando este año esté en Nueva York, caminando por la Quinta Avenida como sé que le gusta celebrar su cumpleaños, recuerde que se le quiere y admira. Este país necesita más gente como Raymundo, con liderazgo y sabiduría del corazón.

Giannina Facio, su esposo Ridley Scott y Raymundo Macís.

Influenciadores que no influyen

La semana pasada se encendieron las alarmas y cundió el pánico, cuando colapsaron algunas plataformas como Instagram y Facebook. Los más preocupados con aquel caos fueron los llamados influencers y creadores de contenido… ¿y ahora quién podrá defendernos? El susto no pasó a más y volvió la paz, cuando el fallo se corrigió y todo volvió a ser como antes. Pero, ¡qué susto!

Definitivamente, no nos podemos escapar de las redes —anti— sociales: son un estilo de vida y muchos ya no podrían vivir sin ellas. Cuestionamientos hay todos los días y, como en todo, hay de todo. Para quienes se quejan porque hay mucha basura, sexo, mal humor y vulgaridad, también hay miles de miles con contenidos científicos, educativos, culturales, económicos, deportivos, en fin, hay para todos los gustos, razas y colores.

Estas plataformas llegaron para quedarse y crecer. No hay vuelta atrás. Lo único que queda es comprenderlas y aprender a convivir con ellas. El mencionado apagón de la semana anterior, también nos recordó lo que pasa cuando colapsa el teléfono y aplicaciones como WhatsApp. Entonces sí que nos asustamos. Nadie podría imaginar un mundo sin esos inventos. 

Dentro de las visiones interesantes sobre esta temática, destaco una historia titulada “El influencer inútil”, de Johan Daniel Pérez, para quien los influencers verdaderos, son figuras de la política, la ciencia y el deporte; los pensadores, los inventores y las glorias de las distintas ciencias. Para Pérez, los grandes influencers cambiaron vidas; entretuvieron a generaciones. Motivaron a explorar el mundo y el universo, inspiraron a millones a luchar por sus sueños y de su ejemplo germinaron grandes campeones.

No hay manera de escapar de las omnipresentes redes sociales.

Hoy, los influencers —dice Pérez— son las mujeres en bikini —culipeladas— o con poca ropa y el hombre que se avergüenza de ser hombre y se disfraza de mujer. Los cantantes que cantan música obscena y ridícula. Lo bueno es ridiculizado y lo estúpido es difundido. Mientras el músico, el poeta o el escritor se pierden en el anonimato, la tonta atractiva que cuando habla da vergüenza, tiene millones de 'likes' por hacer nada. 

Tiene razón Pérez cuando dice que es triste ver todos los días tanta ausencia de intelecto y nos da un sabio consejo: dejar de seguir al idiota o de darle vitrina al estúpido. Pero es más triste ver que las futuras generaciones ya no quieren estudiar o tener un empleo de verdad y prefieren hacer este tipo de contenido basura. Hay que dejar de seguir la estupidez y no hay que darle auge al contenido sin talento; hay que cuidar lo que consume la mente y no dejarse influenciar por este tipo de personas que solo hacen cosas ridículas para entretener a un montón de personas que ni siquiera saben qué hacer con su vida… 

Las alusiones recientes al tema de los influenciadores, me trajeron a las memorias las argumentaciones de Omar Peralta, quien dice que los “influencers” que quieren todo gratis sin siquiera ser famosos, no tienen dignidad.

Según ese autor, hay un grupo de influencers que son el último grito de tragedia en el mundo. Lo quieren todo gratis. Comidas en los mejores restaurantes, alojamientos en hoteles de lujo, productos exclusivos. ¿A cambio de qué? Muy fácil: a cambio de unas cuantas historias en Instagram en las que sus miles de seguidores puedan conocer esos bienes y servicios que ellos están disfrutando por arte de magia. O por arte de su fama, que es casi lo mismo que la magia, porque nadie entiende cómo, cuándo ni por qué se volvieron famosos y merecedores de no pagar por nada.

Las futuras generaciones ya no quieren estudiar, prefieren hacer este tipo de contenido.

El arma de doble filo de las redes sociales ha sido el caldo de cultivo perfecto para la gente que es famosa por ser famosa. “Nadie tiene idea de cuáles fueron sus méritos —dice Peralta—, pero en sus redes sociales cuentan con no menos de 50 mil seguidores que siguen todos sus consejos, le dan 'like' a sus ostentosas fotos y anhelan ser como ellos: presumir de viajes en yates y aviones privados por medio mundo.

El autor va más allá: ¿para qué tratar de encontrar alguna vocación, si los nuevos maestros son ellos? ¿De qué manera rebatirle el éxito a alguien que tiene millones en su cuenta bancaria sin haberse roto la cabeza? Unos bailecitos, imitaciones o chistes en TikTok, unas cuantas fotos en la playa y, abracadabra, vida resuelta.

Si antes sorprendía que algún youtuber o creador de contenido tuviera una vida de lujo, dice,  hoy hasta eso parece digno de admiración, pues incluso aquellos que producían videos dignos de la telebasura hacían algo para tener el reconocimiento que sus fanáticos les otorgaban. Al menos contaban un chiste, hacían algo mínimamente curioso, lo que fuera, pero se esforzaban. Hoy todo lo que tenga que ver con la palabra esfuerzo da la impresión de ser anticuado. 

Ni hablar de la época en la que había que tener algún talento para ser imán de la publicidad. Cantantes, actores, deportistas, cineastas, escritores. Todos ellos eran famosos por algo y quizás ni siquiera lo pedían ni lo querían, pero la publicidad y sus beneficios eran tan solo una de las consecuencias que debían aceptar por haberle demostrado un don a todo el mundo. Nadie podía cuestionar esa legitimidad de merecimiento. Y, eso sí, nunca hubieran perdido la dignidad enviando mensajes para comer gratis a cambio de una historia anclada en sus perfiles de Instagram.

Ellos, los influencers, no son ni talentosos ni creativos; tampoco cuentan con algún nivel de experticia que los califique como especialistas en algo. Pero, paradójica y lamentablemente, lo son todo en uno y al mismo tiempo: publirrelacionistas, genios del marketing, gurús del emprendimiento, expertos en moda, tecnología y cuanto tema se saquen de la manga. Al menos ese es el espejismo que ellos han proyectado y suficientes ingenuos han decidido comprarles. Ser un bueno para nada nunca fue tan placentero.

Finalmente, reconozco que no todos los influencers son mediocres o vacíos, también los hay talentosos, verdaderos artistas, intelectuales reconocidos y gente muy culta que también hacen sus valiosos aportes en redes. 

Como dijo Edgar Lascano, el mundo está cambiando, hay mucho conocimiento espurio y fake news (noticias falsas) en la red, eso desperdicia recursos y tiempo. 

Así, recomienda que lean artículos científicos sobre autores, modelos, instrumentos de su preferencia y sus resultados actuales en diferentes casos en el mundo. Hay que entrar, por ejemplo, a Google Académico y leer algún artículo, eso no le quita más que un par de horas y sabrá si mucho de lo que le tratan de vender es oro o basura.

Los influencers son genios del marketing, gurús del emprendimiento, expertos en moda, tecnología y en todo.

Te tengo un vieras...

Vieras que el pasado 9 de marzo, con motivo de los once meses de partida de su hijo Julián Figueroa, Maribel Guardia escribió un mensaje muy sentido y ampliamente comentado por todos lados. Te extraño demasiado, cada día más y me duele, escribió Maribel y agregó que muchas veces siente su presencia cerca de ella, como una suave caricia en su mejilla y sonríe, le habla, le dice cuánto lo ama, “son breves momentos que me llenan de paz, es cuando recuerdo darle gracias a Dios por darme el enorme regalo de tu amor por el tiempo que él consideró oportuno; amor eterno, por siempre y para siempre. 

Recuerda hijo de mi alma, pedirle a Dios que me dé fortaleza y que proteja y libre de todo mal a esta familia que te extraña todos los minutos y todos los días. Besos, abrazos y bendiciones de tu madre que vive suspirando por ti. Gracias por dejarnos a José Julián, es un niño lleno de luz; no te preocupes por él, está muy cuidado y lleno de amor, te recuerda siempre y presume aquel día del padre que quedaron en primer lugar en todas las competencias del festejo escolar, presume todas las medallas que ganaron, sus ojitos le brillan de amor y orgullo, me dice: “Mi Papito era el mejor del mundo”. Descansa hijo amado en luz eterna que en nuestros corazones habitas por siempre.

Julián Figueroa y José Julián.

Vieras que estoy realmente feliz con la entrega, el pasado 11 de marzo, del Premio Nacional de Cultura Magón 2023 a mi colega y amiga Marjorie Ross. Su frase, dedicada a sus nietas, conmovió a todos y fue ampliamente destacada por los medios. “No lo olviden, chiquitas, nunca se dejen callar”, dijo en un elocuente discurso en el que hizo un llamado a “no permitir la instauración de un reino de las mordazas” e insistió en que “no debe haber cultura sin recursos suficientes”. 

Con la estatuilla dorada en sus manos y gran ilusión, envió a los costarricenses un fuerte mensaje de empoderamiento femenino y libertad creativa. Ross fue premiada por una vida dedicada a la investigación y difusión activa de la identidad nacional enfocada en la literatura, la gastronomía cotidiana, la participación activa y la comunicación abierta como aspectos claves. 

Marjorie Ross feliz con su premio.

Vieras que la diseñadora Stefanny Baldí se mostró muy satisfecha y realizada por haber tenido la oportunidad de diseñar y entregar una jacket a la cantante colombiana Karol G, quien se presentó la semana pasada en el país. La pieza está hecha con pantalones de hombre con tela reciclada, porque a Stefanny le gusta reciclar, ya que el textil es el segundo contaminador mundial porque dura 200 años en deshacerse en el mar; de acuerdo con la diseñadora, Karol G ama la moda y el mar. 

La chaqueta fue elaborada a mano por Baldí, quien disfrutó de los dos conciertos de la colombiana en San José. Martha Navarro, la madre de la cantante, subió en sus redes una foto de la pieza confeccionada por Stefanny y dijo que era hermosa y que estaba muy bien elaborada. Eso llenó de gran orgullo a la diseñadora.

Esta es la pieza confeccionada por Stefanny Baldí.

Eso es todo, los quiere Tía Zelmira, la que todo lo mira.

Lea también

Tía Zelmira

Tía Zelmira: Victoria Ruffo viene con 'Los amantes perfectos'

Un notable elenco mexicano presentará la exitosa comedia en el Auditorio Nacional del Museo de los Niños, el próximo 28 de abril.