POR | 20 de mayo de 2016, 14:55 PM

El dolor de una enfermedad terminal podría ser devastador para muchos, sin embargo, un grupo de personas decidió cambiar eso por una sonrisa y una mejor atención humanista.

Ahora, los habitantes de San Isidro de Heredia dan un ejemplo de amor al prójimo, de ese amor del bueno de amor por los demás.