7 Días
Los hitos del Bicentenario
Especialistas en varios ámbitos nos ayudaron a conformar la lista de los hechos más trascendentales que sirvieron como base del país que disfrutamos y amamos hoy en día.
En la lista de edificios declarados patrimonio histórico-arquitectónico en Barrio Amón hay muchos nombres conocidos: la Alianza Francesa, la Casa Obregón Loría y el Hotel Britannia. El distrito josefino del Carmen alberga 43 edificaciones de este tipo y una de ellas es la famosa “Casa de Don Quijote”, cuyas imágenes puede ver en el video adjunto.
Mario González Feo, un destacado intelectual y escritor josefino que también fue director de la Fábrica Nacional de Licores, compró esta propiedad en 1939. En aquel entonces, León Cortés Castro era el presidente del país. La casa está ubicada en el costado oeste del Instituto Nacional de Seguros (INS) y recibe ese nombre porque el dueño original era fiel amante de las historias de Don Quijote de la Mancha.
Detrás de la tapia de ladrillo decorada con llamativos mosaicos del personaje literario de Miguel de Cervantes, hay dos casas. En una de ellas vive la escritora Carmen Odio González, nieta de Mario González y heredera de la propiedad que se estima que existe desde hace unos 100 años.
“A la entrada de la casa nos reciben estas arcadas con los frescos de Don Paco Amighetti, son copia de unos frescos de Italia. Todos estos arcos son hechos en ladrillo, todo hecho en Costa Rica, por artesanos y artistas costarricenses”, comentó doña Carmen.
Conserva muchos elementos originales de su construcción, entre ellos los frescos del maestro Francisco 'Paco' Amighetti Ruiz, declarado Benemérito de la Patria y cuyas obras destacan entre las colecciones del Museo de Arte Costarricense y de los Museos de Arte Moderno de Nueva York, Río de Janeiro (Brasil) y Osaka (Japón).
La casa tiene una hermosa capilla construida como homenaje a María González Frías, la tía del dueño original.
“Una de las partes más lindas de la casa es la capilla, que hizo mi abuelo en honor a una tía que lo crio. El techo de la capilla fue decorado por Luisa González, mi tía abuela, hace 77 años. Son escenas del Arca de Noé, los animalitos entrando al arca. Porque a nosotros nos daba mucho miedo entrar a la capilla cuando éramos pequeñitos”, agregó Odio.
Aunque no lo parezca, esta casa tiene tres pisos y el acabado de ladrillo que decora sus paredes muy posiblemente proviene de la antigua ladrillera de La Uruca.