Walter Espinoza, director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), señaló que la supuesta narcofamilia desarticulada este miércoles en San Ramón, Alajuela, estaría involucrada con extorsiones y homicidios.
El aparente grupo criminal recibía la droga desde proveedores en Barranca, Puntarenas, para distribuirla en el centro del cantón alajuelense y en Palmares.
“La narcofamilia de apellido Larga Espada, además de traficar drogas portaba armas de fuego, ejecutaba extorsiones y también estaría involucrada en temas de homicidio. Hoy en total se realizaron 21 allanamientos de forma simultánea y que iniciaron desde las 5 a.m.”, dijo Espinoza.
Declaraciones de Walter Espinoza:
El grupo estaba asentado en un precario llamado El Progreso en el centro de San Ramón y operaba en suelo nacional desde hace dos años.
La banda estaría integrada por 25 personas, quienes las autoridades esperan detener este miércoles.
“El proceso de investigación lleva ya varios meses y durante este tiempo ya se habían detenido a 12 personas, sin embargo, hoy esperamos detener a 25 más que estarían relacionadas con el grupo. Hasta el momento hemos decomisado drogas, armas de fuego y dinero en efectivo”, detalló Espinoza.
En los allanamientos participaron 450 funcionarios del OIJ, de la Policía Municipal de San Ramón, Fuerza Pública y de la Unidad de Intervención Policial (UIP).